La rapidez de adaptación del turismo a los efectos del cambio climático es esencial para mantener la competitividad del sector en la Comunitat Valenciana y su fuerte influencia en la economía regional

Un estudio realizado por el catedrático de Análisis Geográfico Regional en la Universidad de Alicante Jorge Olcina y el profesor de Geografía Física en la Universitat de València Juan Javier Miró analiza cómo el aumento de la temperatura debido al cambio climático permite ampliar la temporada turística en primavera y otoño, pero genera peor confort térmico en el centro del verano.

Pérdida de confort térmico

Este trabajo explica cómo la subida de las temperaturas nocturnas en las zonas costeras y diurnas en el interior impacta en el sector turístico valenciano. El artículo muestra cambios en la temperatura y en los patrones estacionales de las lluvias que inciden en el confort climático, recurso principal para el turismo.

«Se prevé una fuerte pérdida de confort térmico en verano de cara al año 2100, mientras ocurre lo opuesto para el invierno, ya que en esta estación la tendencia es hacia una mejora en toda la Comunitat Valenciana», apunta Olcina.

Así, los autores del estudio proponen modificar el calendario de «temporada alta» para incluir los meses de junio y septiembre, mejorar el acondicionamiento climático de los establecimientos turísticos, disponer de buenos sistemas de abastecimiento de agua y modificar los protocolos de protección civil y sanidad pública para hacer frente a peligros climáticos como las fuertes lluvias. Los objetivos han sido estudiar en la Comunitat Valenciana la distribución territorial del confort térmico mediante el análisis de factores climáticos y geográficos.