El secretario general de la Unió de Llauradors i Ramaders entre los años 1992 y 1998, Miquel Vilalta Sebastià, falleció el pasado sábado a los 72 años. Fue el impulsor de la profesionalización de la entidad, así como una de las figuras que luchó por la modernización del sector en los años 90, según miembros de La Unió.

El que fuera el tercer secretario general de la organización era natural de Herbers, en la comarca de Els Ports, pero residía en Vila-real.

Vilalta sustituyó a Toni Lozano en 1992 al frente de la secretaría general de la Unió. Posteriormente, tras agotar su mandato estuario, fue sustituido por Lucio Monteagudo en 1998. Además, fue fundador tanto de la Unió como de la Unió de Pagesos de Catalunya, presidente de la fundación Ivifa y responsable de cítricos de la organización.

Según el primer secretario de la Unió de Llauradors, Joan Ramón Peris, Miquel Vilalta «marcó los inicios de la organización» en la «lucha del mundo rural». «Era ingeniero técnico agrícola, y como tal intentó aplicar sus conocimientos a los integrantes de la Unió a través de la formación. Quería hacer de la agricultura una profesión moderna, con tal de alejar la imagen que tenía la sociedad en aquel momento sobre la figura del agricultor, explicó ayer Peris a Levante-EMV.

«Era un hombre discreto y honesto, convencido de sus ideas. También un compañero de batallas. Trabajó siempre en perfecta sintonía con el entorno, alejado de cualquier lucha de poder», añadió el primer secretario.

Por su parte, el actual secretario general de la Unió, Carles Peris, aseguró que Vilalta ha sido un «referente» para los valencianos y uno de sus «mentores». «Fue uno de los que decidieron apostar por la gente joven que, como yo, entramos en la organización para defender nuestra profesión», algo «muy positivo» en aquel momento. «Intentó otorgar a la Unió de cierta entidad en la lucha por los profesiones que la integramos. Es una pérdida enorme», subrayó el actual dirigente agrícola.