El president de la Generalitat, Ximo Puig, considera que las restricciones nocturnas en la Comunitat Valenciana son «suficientes» si el resto del día «se actúa con responsabilidad», aunque se mostró «preocupado» por el «tardeo».

El jefe del Consell respondió así ante la posibilidad de ampliar el toque de queda de cara a Nochevieja ante el aumento de contagios y las hospitalizaciones. Al respecto, Puig defendió que la Generalitat «no ha tomado medidas de manera compulsiva» y ha analizado en cada momento cuál era la situación para «intentar dar una respuesta serena y equilibrada».

«Si hay circunstancias cambiantes hay que actuar», defendió, aunque apuntó que ahora mismo, las medidas valencianas son «de las más restrictivas de España en el caso de los horarios», y recordó que están establecidas a las 23 horas, que se amplía a las 00.00 el día de Nochevieja.

No obstante, admitió que con la pandemia «no hay recetas» ni un «recetario para buscar soluciones inmediatas», y advirtió que «cualquier irresponsabilidad» puede «acabar afectando a mucha gente». «El problema no es el horario», indicó Puig, que pidió «la máxima responsabilidad de todos», los dueños de los locales y los ciudadanos que consumen ocio, que «tienen que tener las medidas de seguridad claras». Y advirtió: «Un día no es un día, un día puede ser el último día». La previsión es aumentar la vigilancia ante los anuncios de fiestas de «tardevieja».

Preguntado por la situación de los hospitales (antes de que se conociera que ayer se alcanzaron las 1.725 hospitalizaciones), Puig destacó la «fortaleza» del sistema sanitario, que en el punto álgido de la pandemia llegó a casi 2.500 hospitalizados aunque calificó de «preocupantes» las cifras.