Casi cincuenta grados de diferencia en un intervalo de apenas diecisiete días. En un mes de enero pleno de contrastes, la Comunitat Valenciana ha pasado de los -15,5 grados del día 12 de enero en Ademuz a los 29,8 de Alicante el pasado viernes 29. Una variación de 45,3 grados. Así lo confirmaba ayer José Ángel Núñez, jefe de Climatología de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en la Comunitat Valenciana. Unas oscilaciones extremas que muchos expertos ya relacionan con los efectos del cambio climático.

Si la borrasca Filomena sorprendió con temperaturas gélidas y de récord en la península, pero especialmente en las zonas de interior, los temporales Hortensia e Ignacio dejaron fuertes vientos de poniente que dispararon los termómetros. Lo cierto es que enero se despidió de nuevo con un viento que se ha prolongado en el inicio de febrero. La borrasca Justine ha venido provocando desde el viernes rachas huracanadas en muchos puntos de España, pero especialmente en el litoral.

La más alta desde 1939

Alicante, con 29,8 grados centígrados del viernes batía previamente los récords de calor en pleno invierno. «No solo es la temperatura más alta jamás registrada en ese observatorio desde que hay registros, en 1939, sino que es la temperatura más alta jamás registrada en la red de estaciones de Aemet para un mes de enero», precisaba ayer Rubén del Campo, portavoz de la Aemet a nivel nacional. La mínima ese día en Alicante no bajó de 16,8º C, lo que también la convierte en la más alta para un mes de enero.

Benidorm alcanzó ayer rachas de viento de 97 km/h. Le siguieron Bicorp y Vilafranca, con rachas de 86 km/h; Morella y Fredes, con 84 km/h; Xàtiva, con rachas de 80 km/h; y el Aeropuerto de Valencia, con 76 km/h. Así mismo, Torreblanca llegó a las rachas de viento de hasta 74 km/h; Villena a 72; Castelló y el Aeropuerto de Alicante-Elx a 71; Pinoso a 70 y Alicante a rachas de 68 km/h.

Las rachas incluso propiciaron el vuelco de varios camiones en la Font de la Figuera y un muro en La Nucía. Los bomberos tuvieron que intervenir en numerosos puntos del territorio por la caída de árboles, elementos del mobiliario urbano o de las fachadas.

Once provincias en riesgo

Un total de once provincias estarán hoy en riesgo o riesgo importante por viento, precipitaciones o fenómenos costeros. En concreto, está previsto el aviso amarillo en Castelló y Valencia. Este martes se prevé la entrada de un frente frío por el noroeste peninsular, dejando nubosidad y precipitaciones abundantes en Galicia, que podrían ser localmente fuertes o persistentes, principalmente en el oeste y en áreas montañosas. Las lluvias más fuertes están previstas para el jueves y persistirán el viernes.