Levantar un nuevo puente entre las universidades y el mundo empresarial. Esto es lo que pretende la Conselleria de Innovación con una nueva iniciativa que impulsa y cuyo objetivo es fomentar que cada vez más doctorandos de las universidades realicen sus tesis doctorales contratados en un entorno empresarial, vinculando así directamente la investigación con la innovación.
Para este propósito, la conselleria destinará más de un millón de euros que se repartirán las cinco universidades públicas valencianas a través de convenios. Según explican fuentes del departamento que dirige Carolina Pascual, se pretende que haya una formación doctoral innovadora e interdisciplinar, que aporte a los jóvenes investigadores nuevas habilidades. Asimismo, estas redes pueden ser una oportunidad laboral para que quienes opten por este tipo de doctorados amplíen su carrera más allá del ámbito académico.
Pero los beneficios o ventajas no son solo personales o profesionales, con los doctorados industriales también se potenciaría la transferencia de conocimiento del ámbito universitario hacia el resto de la sociedad, en este caso las empresas, con un papel importante en la transformación económica y el impulso a la innovación que pretende el Consell en la Comunitat Valenciana.
Como apunta la consellera de Innovación, Carolina Pascual, la «captación» de jóvenes investigadores por las empresas —sin perder el vínculo con las universidades— les puede proporcionar «nuevas salidas profesionales», especialmente en áreas de estudios relacionados con los sectores agroalimentario, de las telecomunicaciones o el de la Química, especialmente el de Materiales, por poner solo algunos ejemplos.
«En ambas direcciones»
Para la consellera, los programas de investigación industrial o desarrollo experimental compartidos por empresas y universidades también pueden ser «una herramienta muy importante», a través de la cual obtener «una formación doctoral innovadora, al integrarse en el programa formativo aspectos de carácter multidisciplinar y habilidades del entorno empresarial como la comunicación, el trabajo en equipo, el emprendimiento o la gestión económica financiera».
«La transferencia va en ambas direcciones, ya que la universidad aporta tecnologías y conocimiento y el doctorando adquiere la capacidad de gestionar proyectos y una serie de capacidades relacionadas con el mundo empresarial», resume Pascual. El millón de euros con el que se ha presupuestado esta iniciativa está financiado al 50 % por el Fondo Social Europeo y será distribuido por la Universitat de València, la Universitat Politècnica de València, la Jaume I de Castelló, la Miguel Hernández de Elx y la Universidad de Alicante, según detalla el Consell.
Este programa —dependiente de la dirección general de Ciencia—, cuenta con tres ejes fundamentales, explican desde la conselleria. El primero de ellos es el «apoyo directo» a los doctorandos y doctorandas que desarrollen una investigación en colaboración directa y contratados por una empresa. El segundo eje es ofrecer «incentivos» a los grupos de investigación que desarrollen un proyecto en colaboración directa con una empresa. Por último, el programa también prevé cubrir los gastos de soporte de las universidades públicas para ampliar el alcance de los doctorados en empresas.
La iniciativa de los doctorados, —que forma parte de la estrategia de transferencia de conocimiento y tecnología entre empresas y universidades, con la que el Consell pretende «contribuir a la transformación del modelo productivo» valenciano, apunta Pascual—, se suma a otras iniciativas que encabeza al conselleria de Alicante.
En los presupuestos de la Generalitat para 2021 el área de Ciencia e Investigación ha incrementado su dotación en casi un 65 % y alcanza un total de 100,3 millones de euros. Entre otros puntos se incluye la convocatoria GenT, ya consolida y que atrae a la Comunitat Valenciana científicos de todo el mundo.
