El secretario autonómico de Turismo de la Comunitat Valenciana, Francesc Colomer, aseguró ayer que en el Consell son «partidarios de que la música en vivo se vaya recuperando con garantías», tras ser preguntado por el concierto de ‘Love of Lesbian’ celebrado el pasado fin de semana en Barcelona, al que asistieron miembros de Salud Pública, de su secretaría autonómica y promotores de festivales. La intención de la expedición, como informó ayer este diario, fue explorar si algunos aspectos de aquel experimento son extrapolables a la Comunitat Valenciana.

En la presentación de las Jornadas de los Platos de Cuchara de Conhostur, Colomer remarcó la «prudencia» y la «cautela» que debe envolver al sector de la música en vivo, y subrayó la seguridad como valor de marca, ya que «el mundo poscovid será el mundo ‘presiguiente susto’». Por eso, valoró ese concierto piloto «y toda innovación en clave de seguridad». «Todo aquel experimento en clave tecnológica ha de ser muy bien recibido», añadió.

Así, afirmó que lo que sucedió en Barcelona, con el test de antígenos y la mascarilla entre otras medidas de un amplio dispositivo sanitario, «marca un punto de inflexión y esperanza», aunque también destacó que es complicado garantizar la rentabilidad de los conciertos, ya que la inversión de los organizadores en medidas sanitarias fue de 60.000 euros.

Colomer señaló que 2021 «seguramente sea un año en el que hay que readaptarse y ver formatos menores», pero, al mismo tiempo, afirmó que es un ejercicio «de comenzar a programar convocatorias musicales, porque esto significa economía y empleo». Al respecto, sostuvo que «un trabajo esencial para una familia es su vida y su propio trabajo» y que eso «hay que ponerlo en el debate colectivo».

Por esta razón, defendió que los festivales tendrán que «arrancar» y que respetando las restricciones por la pandemia «no hay que capitular ni rendirnos antes de tiempo, sino encontrar un modelo que compatibilice salud con economía», ya que la música, defendió, puede ser una «respuesta terapéutica de los grandes problemas de necesidad de felicidad de la sociedad futura».

Pujanza del turismo interior

En cuanto a las expectativas turísticas de cara a Semana Santa, Colomer destacó que «no va a arrojar grandes resultados» para el sector y que, como ya se había advertido, el primer semestre de 2021 sería «francamente malo» ante la evolución de la pandemia.

Pese a estos datos, el líder de Turisme incidió en que el mercado doméstico —los movimientos de valencianos por la Comunitat—«va a moverse todo lo que se pueda, porque hay ganas», al tiempo que señaló que el segundo semestre puede ser «el del resurgir y el de retomar la actividad, si va acompasado a la vacunación». Así, se mostró optimista respecto a la ocupación en el ámbito rural, sobre el que destacó que alguna encuesta sitúa en números de ocupación del 60 %, si bien espera que debido a que la gente reserva a última hora, este tipo de turismo crecerá.

No obstante, señaló que en la zona de costa, pese a estar creciendo las reservas, la apertura de los hoteles en el litoral es de entre el 40 % y el 50 %: «El interior, por la descongestión, ha podido resistir de otra forma y es su gran momento —la Semana Santa—».

Respecto al turismo internacional, Colomer incidió en que el turismo británico, el más numeroso en la Comunitat, no va a viajar debido a las restricciones de su país, así como que pese a la recuperación de Alemania la Semana Santa «no va a ser un periodo cargado de turismo internacional».

Además, Turisme informó de que en lo que va de año se han registrado un total de 13.867 reservas realizadas a través del Bono Viaje para viajar el primer semestre del año, que corresponden al segundo periodo del programa Viatgem CV y que se unen a las más de 9.000 reservas realizadas durante el último trimestre de 2020. La gran mayoría son para la provincia de Alicante, con 438 reservas para este fin de semana largo; seguida de la de Castelló con 167; y la de Valencia, con 111 .

La hostelería prevé pérdidas del 72 % en Semana Santa

La Coordinadora de Hostelería de la Comunitat Valenciana (Ceoh) publicó ayer datos de una encuesta entre sus asociados según la cual estos locales esperan pérdidas del 72 % respecto a lo facturado durante la Semana Santa de 2019. Según la Ceoh, las pérdidas medias por negocio se elevan hasta los 80.000 euros desde el inicio de la pandemia, lo que ha llevado a que un 30 % del sector haya cerrado. Por eso, insisten en sus reclamaciones: por un lado llaman a flexibilizar las medidas a partir del 12 de abril y por otro piden más ayudas y más ágiles.