De un sol radiante a una espectacular tormenta de lluvia, viento y granizo en cuestión de unos minutos. Así vivieron durante la tarde de ayer los vecinos de buena parte de la comarca de la Plana Baixa una inesperada granizada que colapsó alcantarillados, volcó vallas y llenó de un manto blanco terrazas y balcones.

Las imágenes hablaban por sí mismas. La Agencia Estatal de Meterología había previsto alerta amarilla por tormentas en el interior y la costa norte de Castelló, pero la evolución ha sorprendió a los vecinos del sur de la provincia que vieron cómo el cielo primero oscurecía para después emblanquecer hasta convertirse en una impresionante cortina de agua y granizo.

En municipios como Nules, el granizo provocó inundaciones como la que sufrieron los vecinos de la calle San Ramón, donde el agua llegó a entrar en algunos bajos.