El curso escolar ha llegado a su fin y tras más de un año de Covid, con la vacunación en marcha, llega un verano en el que los niños y niñas "necesitan más que nunca" jugar en el exterior, al aire libre y de forma compartida con sus iguales, para compensar todo este tiempo en que no han podido hacerlo. Pero además, predominarán aquellos juguetes y juegos que impliquen actividad física y saludable, que reflejen la diversidad de la sociedad en la que vivimos y que sean más sostenibles con el planeta.

Estas son algunas de las claves que marcarán las tendencias de juego este verano para la primera generación que ha vivido un confinamiento y una pandemia, ha apuntado María Costa, doctora en pedagogía y directora del departamento de I+D en AIJU, el Instituto Tecnológico del Producto Infantil y Ocio.

Pero la pandemia ha provocado también un "aumento exponencial" del uso de las pantallas y los videojuegos de "difícil retorno", ha advertido la experta, quien ha apelado al papel de padres y madres para "contrarrestar el apantallamiento" con actividades en la naturaleza y como "modelo para dar ejemplo".

Precisamente para conocer cómo se relacionan con los juguetes y la tecnología, AIJU ha desarrollado una investigación, financiada con fondos del IVACE, en el marco del macroproyecto de investigación 'Tech Toys Interaction' en el que han participado 3.500 niños y niñas, de 0 a 12 años, de cinco países (España, Alemania, Francia, Italia y Reino Unido).

Según este estudio, con la Covid, niños y niñas se han dado cuenta de que, más allá del individualismo, a veces, hay que sacrificarse por un bien común y por tanto, son "más abiertos a temas sociales" que en épocas anteriores, ha explicado Costa en una entrevista a Europa Press.

A estos niños y niñas les preocupa el impacto en el planeta y la sostenibilidad ambiental, es la generación más diversa -conviven distintas etnias, culturas, niveles socioeconómicos, realidades familiares y de género- y por tanto, es la "más inclusiva" y valora la riqueza de esa diversidad.

"Tienen en cuenta estos temas presentes en su día a día y también lo buscan en los juegos y en los juguetes", ha subrayado Costa, quien ha apuntado a la "rotura de estereotipos" de una generación que ha visto en casa "modelos menos estereotipados que las generaciones anteriores".

En el marco de la diversidad, AIJU trabaja también en el proyecto INCLUTOYS, financiado por el IVACE, para la mejora del proceso de creación juguetes con la mediante la adaptación de herramientas de diseño universal para permitir que un mismo juego o juguete se adapte a niños y niñas con diversidad funcional, ya sea visual, auditiva, motora o de cualquier otra índole.

"Se trata de diseñar juguetes que permitan la máxima inclusión y no de hacer juguetes específicos", ha explicado la directora del departamento de I+D de AIJU.

DEPORTE VS "APANTALLAMIENTO"

De forma paralela, la pandemia ha incrementado la presencia de la tecnología en la vida de niños y niñas, se ha abierto "la caja de pandora" y se habla incluso de la "ubicuidad", ha advertido Costa. Si bien, antes del confinamiento, el 61% pasaba más tiempo del recomendado por los expertos frente a las pantallas, este porcentaje aumentó al 95% en confinamiento y en este curso escolar, el 80% está más tiempo frente a las pantallas que antes del confinamiento.

La experta ha señalado que los menores se han dado cuenta de que "para estar con amigos ni siquiera hace falta estar en persona". Han desarrollado habilidades tecnológicas compartiendo videollamadas a través de plataformas que "conocen perfectamente" (Zoom teams, etc.) y se han adentrado en Youtube, WhatsApp, Tik Tok y redes sociales no solo para ver sino también para "crear contenidos".

El uso de Smartphones y tablets ha ido al alza pero también para el uso educativo, con nuevas formas de aprendizaje desde el hogar y ahora las familias quieren intentar revertir este "apantallamiento" con mayor actividad física y deporte. De hecho, el 90% de los padres y padres considera que las actividades físicas son clave para desarrollo físico y emocional de sus hijos e hijas, en España especialmente.

En este punto, Costa ha hecho hincapié en el "especial interés" de las familias por los hábitos de comida e higiene saludables, algo a lo que los menores se muestran "más abiertos".

En cualquier caso, si algo ha puesto de relieve la pandemia es "el valor del juego", como refugio, por su valor educativo y por diversión. "La pandemia ha hecho jugar más que nunca", ha recordado Costa. De hecho, el tiempo que los niños y niñas han destinado a jugar con juguetes durante el confinamiento ha aumentado en un 60%, según se un estudio realizado dentro del proyecto de la Guía de AIJU, financiado por el IVACE.