Más de una treintena de vuelos procedentes de Reino Unido aterrizan hoy en los aeropuertos valencianos en el primer día de alivio de las restricciones a los viajes de los turistas británicos. El Gobierno de Boris Johnson mantuvo a España, y por ende a la Comunitat Valenciana, entre las zonas ámbar de su semáforo en su última revisión. Este color antes obligaba a guardar cuarentena al regreso, pero ahora esta medida decae para los británicos vacunados, lo que podría animar un mercado fundamental para el sector turístico valenciano.
Por el momento no hay previsiones firmes, pero las aerolíneas han duplicado las plazas que ofrecen rumbo a la autonomía en apenas dos semanas. Así, durante esta semana podrían llegar más de 55.000 británicos según los datos recopilados por la secretaría autonómica de Turisme. Unos 50.000 a Alicante y el pico a València. De hecho, el Altet recibe hoy 28 de los 32 vuelos que llegan desde las islas y Manises los otros cuatro.
Las restricciones a los viajes no son las únicas que acaban hoy en Reino Unido. En plena escalada de casos, el Gobierno de Johnson prevé relajar el uso de la mascarilla, elevar aforos y reabrir los pubs por la noche sin limitaciones. Una serie de medidas que han desatado una tormenta de críticas desde la comunidad científica, que le acusa de buscar una inmunidad de grupo a base de contagios. En los últimos días están reportando más de 50.000 casos cada 24 horas y los expertos advierten de que se podrían alcanzar los 200.000. La variante Delta, que supone el 95 % de los casos en el país, estaría detrás de esta ola que también sufre España.
El sector turístico todavía no se atreve a medir el impacto que pueda tener este paso en las reservas. A nivel nacional, no obstante, la Asociación de Líneas Aéreas informó de un aumento del 400 % en la compra de billetes, aunque remarcó que «partían de niveles muy bajos», lo que distorsiona ese crecimiento porcentual.
