El Consell ya tiene vía libre para ampliar la exigencia del certificado covid en más espacios y durante más tiempo, la única medida impuesta en esta sexta ola para intentar atajar las cifras desbocadas de transmisión del virus.

La Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) daba ayer vía libre a la petición del Consell en un auto que considera que ampliar y extender la medida es «proporcional, necesario y está justificado» ante el aumento de positivos y una sexta ola que está «sin control» y que va a «seguir creciendo en los próximos días» poniendo incluso en problemas al sistema sanitario.

Tras la aprobación del tribunal valenciano, la Conselleria de Sanidad ya tiene las manos libres para publicar la orden y que esta entre en vigor al día siguiente, muy probablemente mañana viernes 24 de diciembre y hasta el 31 de enero. Así, una vez se cumpla con el trámite de la publicación, se exigirá el certificado covid y el DNI para entrar en el interior de cualquier lugar que preste servicio de comida o bebida (sea grande o pequeño ya que se quita la exención a los espacios de menos de 50 personas de aforo). Además, se pedirá el justificante de estar vacunado con pauta completa, haber pasado la enfermedad o tener una prueba negativa en «lugares abiertos o cerrados» donde se preste servicio de comida o bebida, sea quien sea quien lo preste como en un cátering tras un acto, por ejemplo.

Esta adenda generó ayer confusión ya que parecía apuntar a que el certificado se iba a pedir también en las terrazas de bares y restaurantes. Fuentes de la conselleria confirmaron que la literalidad de la norma en vigor desde el día 3 en lo que se refiere a que se exige el pasaporte para el «interior» de los locales no cambiaba, aunque el president Ximo Puig ya ha adelantado que se estaba ya considerando esta posibilidad y que este apartado era un añadido para hacer referencia a actos como catering o bufés servidos al aire libre.

También se pedirá en los cines, circos o sedes festeras para aquellos actos en los que haya consumo de comida o bebida; en festivales de música en interiores o exteriores donde no se pueda mantener la mascarilla todo el tiempo sin la limitación de aforo de 500 personas que había hasta ahora; en los bares de alojamientos turísticos, instalaciones deportivas o centros de mayores; en gimnasios (donde además hay que llevar la mascarilla siempre) y en piscinas cubiertas.

Se mantienen el resto de espacios donde ya era necesario presentarlo: establecimiento de ocio y entretenimiento; locales de actividades recreativas y de azar donde haya servicio de restauración; para las visitas en los centros hospitalarios (aunque ahora mismo están prohibidas en la C. Valenciana) y para las visitas en los centros residenciales del sistema público y privado, también prohibidas dependiendo del nivel de alerta en que se encuentre el centro.

Sistema sanitario en peligro

Los magistrados de la sala de lo contencioso dan por bueno ampliar el alcance del pase covid tras escuchar los «elocuentes» argumentos sobre la marcha de la pandemia presentados por la subdirectora general de Epidemiología de la Conselleria de Sanidad, Hermelinda Vanaclocha, y que apuntan a que la ola de contagios está ya creciendo a un ritmo exponencial con un número reproductivo básico por encima de 1 «lo que significa que la epidemia no está controlada». Todo ello es indicativo que la epidemia está sin control y que seguirá creciendo en los próximos días».

Según este informe presentado por Sanidad, en los niveles en los que está la pandemia, el sistema sanitario puede llegar a desbordarse ya que «ya presenta indicios de saturación» y todo pese a que la gravedad de esta ola es mucho menor que las anteriores gracias a la vacunación. Aún así, «el alto número de casos empieza a repercutir sobre el sistema asistencial», reconoce Sanidad con un volumen de ingresos que ha subido un 135 por ciento y un 183 % lo que supone que la capacidad hospitalaria está en riesgo medio y riesgo alto para las UCI.