Salvo un milagro que parece imposible, 12 inmigrantes argelinos que viajaban en una patera con otros cinco compatriotas rescatados por Salvamento Marítimo a 22 millas de Alicante este pasado jueves han perdido la vida en el mar tras volcar la embarcación neumática con la que pretendían llegar hasta la península. Un avión estuvo buscando ayer a los inmigrantes desaparecidos en una amplia zona a 30 millas de la costa, pero las probabilidades de encontrar con vida las 12 personas desaparecidas son inexistentes, especialmente por la baja temperatura del agua, unos 14 grados, y el tiempo transcurrido desde el naufragio, que ocurrió el pasado miércoles.
La noticia de este naufragio fue conocida tras el rescate de cinco inmigrantes que iban a la deriva en una embarcación neumática a 22 millas al sureste de Alicante. Un catamarán con bandera portuguesa auxilió a estas personas y Salvamento Marítimo movilizó a su helicóptero de rescate y a la embarcación Salvamar Mirfak, con base en el puerto de Alicante.
Uno de los inmigrantes fue evacuado en helicóptero a Alicante al presentar un estado de hipotermia severa, mientras que los otros cuatro ocupantes de la patera fueron trasladados al puerto alicantino, donde fueron atendidos inicialmente por Cruz Roja antes de hacerse cargo de ellos la Policía Nacional. Una de estas cuatro personas también fue trasladada al Hospital General de Alicante al no encontrarse en buen estado de salud.
Ropas mojadas
Los cinco inmigrantes llevaban sus ropas mojadas y explicaron a los servicios de rescate, y posteriormente a la Policía Nacional, que habían tenido un naufragio y solo habían sobrevivido ellos de las 17 personas que iban a bordo. De acuerdo al relato de los supervivientes, iniciaron la travesía el pasado domingo a mediodía desde la playa Hadjadj en Argelia.
Diecisiete personas subieron a bordo de una embarcación neumática tipo zodiac con un motor fueraborda de 40 cv. Durante dos días navegaron rumbo a la península, en concreto a la zona de Cabo de Palos en Cartagena, pero la travesía comenzó a complicarse cuando se quedaron sin combustible el martes por la mañana.
