Los fallecidos en residencias de la Comunitat Valenciana durante la primera semana de enero se han reducido un 97% en comparación al mismo periodo de 2021, a pesar de que la incidencia general de la pandemia es casi cinco veces mayor que hace un año, según el balance de la patronal AERTE.

"Desde que se completó el proceso de vacunación, los casos graves y los fallecimientos se han reducido de manera importantísima. La vacunación ha demostrado la eficacia en la protección de las personas más vulnerables y los resultados en las residencias son la prueba más palpable de ello, pero si la incidencia sigue creciendo de manera tan importante, los casos en residencia lo harán también, aunque esta variante provoque menor número de hospitalizaciones y fallecimientos", indica en un comunicado José Mª Toro como presidente de AERTE.

En concreto, en la primera semana de enero se han producido cuatro fallecimientos en los centros residenciales de personas mayores de la Comunitat, de acuerdo a los últimos datos publicados por el IMSERSO, frente a los 132 que se produjeron en la misma semana del año 2021, lo que supone un 97% menos.

Pero todo ello se produce en un contexto muy distinto, ya que la incidencia acumulada a 14 días el 11 de enero de 2021 estaba en 516,87 casos por cada 100.000 habitantes mientras un año después se encuentra en 2.452,26 casos; es decir, casi cinco veces superior.

En cuanto a los casos diagnosticados, en el mismo periodo se han registrado un total de 181 en personas residentes frente a los 786 del año pasado (-77%) y de 156 trabajadores frente a los 302 anteriores (-48,3%) lo que para la patronal supone una situación mucho mejor que hace doce meses a pesar del aumento disparado de los contagios en el conjunto de la sociedad valenciana.