La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) exige a la Conselleria de Educación que "asuma sus responsabilidades y que no endose al Ministerio el establecer un permiso para docentes con menores contagiados a su cargo".

CSIF hace esta petición un día después de que el conseller de Educación, Cultura y Deporte de la Generalitat Valenciana, Vicent Marzà, enviara sendas cartas a la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, y al ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, para pedir que estos departamentos del Ejecutivo central establezcan permisos laborales retributivos para las familias con alumnado contagiado de covid.

Sin embargo, el sindicato reprocha al departamento que dirige Marzà de llevar "un año sin responder a la petición de CSIF sobre ese permiso, que evitó introducir en el decreto de permisos y licencias debatido la pasada semana". Además, le recuerda que el personal docente depende de Generalitat y que Educación está transferida.

CSIF recalca que el 2 de febrero de 2021 ya solicitó por escrito a conselleria ese permiso retribuido para el cuidado de menores a su cargo y que la Administración "no respondió". En esta línea, también pidió que lo incluyera en la reunión de Mesa Sectorial de la pasada semana en la que se debatió actualizar el decreto de permisos y licencias del personal, lo que la conselleria "rechazó sin más argumentos", insisten.

CSIF ha planteado que, en los casos de confinamiento de los menores, se emita un certificado con los días que el menor debe permanecer en casa a fin de que sirva como permiso para el docente que lo tiene a su cargo. De esta forma, el permiso retribuido se prolongaría hasta que finalice la cuarentena.

El sindicato considera que "las declaraciones del conseller endosando ahora, un año después de la petición de CSIF, la responsabilidad al Ministerio únicamente pretenden ocultar una mala gestión que se traduce en la indefensión del profesorado".

"Al igual que se puso conselleria de acuerdo con el Gobierno para subir ratios y poner este curso a tantos alumnos en las clases como antes de la pandemia, a pesar de aumentar así el riesgo de contagio, podría haber hecho lo propio con el permiso por deber inexcusable al tener hijos en aislamiento", argumentan.

CSIF lamenta que la propia conselleria llegó a instar al personal afectado por esta situación a que pidiera "un permiso no remunerado de 15 días", una respuesta que el sindicato considera "intolerable, ya que deja indefensos, por ejemplo, a los docentes interinos, que no pueden acceder a este tipo de permisos por interés particular". El sindicato insiste en que la administración "podría haber introducido un apartado específico en el decreto de permisos y licencias y no quiso hacerlo".

"Tarde y mal"

La organización hace hincapié en que la petición ahora del conseller al Gobierno para que incluya ese permiso "llega tarde y mal, sin asumir responsabilidades propias, ya que Educación está transferida y el personal docente está contratado por la Generalitat. Y lo hace después de la sentencia ganada por CSIF que reconoce el derecho de un padre a ese permiso para cuidar a menores contagiados a su cargo".

CSIF, en este sentido, recalca que, como empleador, "la conselleria tiene la obligación de proteger a sus trabajadores, algo que no realiza de manera adecuada". En este sentido, CSIF afirma que "algunos centros están recibiendo en enero el lote de mascarillas que tendría que haber llegado en septiembre, no hay medidores de CO2 en las aulas o no se hace PCR al personal docente tras las vacaciones...". Por ello, muestra su malestar por el hecho de que, "al final, al igual que ocurre en el caso de otros empleados públicos, como el personal sanitario, son los propios trabajadores quienes sacan adelante la situación pese a la mala gestión de la administración".