Una simbiosis entre el arte y la ciencia. Así es como se presenta el proyecto del Instituto de Biología Molecular y Celular de Plantas de la Universitat Politècnica de València (IBMCP-UPV), que busca conectar con el público a través de una exposición artística inmersiva.

Carlos Castellanos investiga sobre la respuesta de las plantas | CARLOS CASTELLANOS

Esta investigación se centra en analizar la respuesta de las plantas a condiciones adversas como la sequía o la humedad para traducirlas en un trabajo artístico, que viene de la mano del artista Carlos Castellanos. «Estamos mezclando una iniciativa de Inteligencia Artificial con la biotecnología de las plantas para dar a conocer las investigaciones del centro», comenta Castellanos. «Busco representar cómo se vería el jardín del futuro tras el cambio climático», añade.

Para ello, el artista desarrolló la primera parte del proyecto durante los últimos tres meses, trabajando junto a investigadores del centro para conocer mejor cuáles eran sus procesos científicos. «Lo más difícil era decidir qué línea de trabajo queríamos seguir porque hay muchas y todas son interesantes», explica Castellanos. Finalmente, se decantó por una propuesta muy relacionada con el impacto que tendrá el cambio climático en los cultivos.

«Una de las líneas que estamos trabajando es en cómo vamos a encarar este cambio climático para que la agricultura sufra menos. Esto supone conocer muy bien la respuesta de las plantas a los cambios de temperatura, humedad o sequía», comenta Javier Forment, responsable del servicio de bioinformática del instituto.

Forment explica que el objetivo de esta iniciativa es aproximar la sociedad al trabajo científico. «Me gusta pensar que este proyecto tiene un interés altruista, no solo de dar a conocerlo, sino también de posibilitar que los artistas ofrezcan a la ciencia nuevas concepciones para abordar los problemas que se intentan resolver», explica Forment. «Buscamos ser capaces de poner en un lenguaje creativo conceptos totalmente científicos y eso ya es un reto. No descarto que cuando vea el resultado final no llegue a entenderlo, al final es un desafío intelectual para un científico», comenta Pablo Vera, director del IBMCP.

Ahora empieza para Carlos Castellanos la parte más complicada: representar a través de sonidos o imágenes los resultados de las investigaciones y fabricar la máquina de Inteligencia Artificial que le ayudará a hacerlo. «El principal reto es construir la máquina porque es necesario mucha financiación y muchos recursos para que salga adelante», comenta Castellanos.

La exposición final del proyecto está programada para el 26 de octubre en el centro de Cultura Contemporánea del barrio del Carmen en València.

Primera residencia artística

Patrocinada por el vicerrectorado de Arte, Ciencia, Tecnología y Sociedad de la Universitat Politècnica de València, esta residencia artística es la primera que se desarrolla en la capital valenciana. «En otros lugares del mundo ya se han normalizado este tipo de iniciativas, pero en esta ciudad nosotros somos pioneros», comenta Vera.

El director del instituto incide en la importancia de continuar con proyectos parecidos si la respuesta de la sociedad es positiva. «Lo ideal sería conjugar los esfuerzos institucionales y hacer una nueva edición, pero todo depende de la reacción del público. Si hay un mínimo impacto que beneficie a la institución, yo sería partidario de repetir, quizá con una orientación distinta, investigando otras líneas», añade Vera.