La Audiencia Provincial de València ha condenado a cuatro años de prisión a un vecino de Vilamarxant por intentar matar a cuchilladas a un hombre en un ajuste de cuentas ocurrido a finales de mayo de 2018. El acusado, de 41 años, confesó ayer los hechos en el juicio por lo que vio reducida la pena de ocho años de cárcel que solicitaba inicialmente el fiscal.
La víctima sufrió una herida en el tórax de doce centímetros de profundidad que le afectó al pulmón. Pese a ello logró escapar del chalé del procesado, donde éste lo había encerrado y acuchillado sin mediar palabra, y fue auxiliado por dos personas en un camino rural próximo.
La Sección Cuarta de la Audiencia Provincial impone también al procesado, defendido por la letrada Pilar Marí Beltrán, una multa de 270 euros por un delito de hurto y uso de vehículo a motor ya que se llevó el coche de su víctima y lo abandonó en un paraje de este mismo municipio del Camp de Túria, donde le prendió fuego.
Los hechos ocurrieron el 27 de mayo de 2018 cuando el ahora condenado acordó un encuentro con su víctima en una estación de servicio de Vilamarxant. Una vez acudió a la cita, ambos se dirigieron al chalé del acusado, situado en esta misma localidad, en el coche que conducía el agredido.
Según el relato de hechos del fiscal, que ha reconocido como cierto el acusado, nada más entrar al recinto el procesado cerró la puerta de entrada a la parcela con una cadena y un candado. Así, tras colocarse detrás de su víctima y nada más bajar éste del coche, «con el propósito de causarle la muerte le acometió con un cuchillo de cocina, clavándoselo en la parte izquierda de la espalda a la altura del omoplato».
Mientras le gritaba «te voy a matar», el condenado hizo ademán de clavárselo de nuevo, aunque no lo consiguió al esquivar este segundo ataque el agredido, quien salió corriendo y huyó del chalé saltando la valla perimetral.
El procesado subió al coche de su víctima con la intención de perseguirlo pero desistió en su propósito al ver que dos personas estaban con él auxiliando en un camino rural. El herido fue evacuado al hospital donde permaneció ingresado ocho días y tuvo que ser intervenido.
El grupo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Llíria arrestó al presunto agresor, quien abandonó el coche calcinado en un paraje de Vilamarxant. La Audiencia lo condena ahora a cuatro años de prisión por un delito de homicidio en grado de tentativa.
