Los problemas de alumbrado en el entorno de las calles Vallés y Caldereria han despertado las quejas vecinales y del PP, que en las redes sociales ha criticado la tardanza del consistorio en solventar la falta de luz durante más de una semana. También en la plaça del País València, a la entrada de la ciudad, se repiten las reclamaciones de los residentes por los frecuentes apagones en la vía pública. Fuentes municipales subrayan que se está trabajando en solventar los fallos técnicos que han ocasionado estas interrupciones lumínicas. Desde el PP, igualmente, han censurado el prolongado parón en las obras de interconexión de dos redes de agua potable, que mantiene desde hace meses las vallas y el material de obra a la intemperie y dificultando la circulación en Ximén de Tovía. Algo similar ocurre con la reurbanización de la calle del colegio Martínez Bellver. En ambos casos, unos imprevistos no contemplados en el proyecto inicial han obligado a introducir cambios, ralentizando el calendario de ejecución.

Por último, los populares han incidido a través de sus canales en el «malestar» que, a su juicio, cunde entre el personal del ayuntamiento y que ha conducido a la marcha en poco tiempo de la jefa de Personal y del jefe de Urbanismo -en comisión de servicios- así como de otro técnico de Turismo que ha pedido una excedencia.