El conocido anticuario local Vicente Llorens ha ofrecido al Ayuntamiento de Xàtiva un cuadro de Luca Giordano por 45.000 euros, cantidad que el propio comerciante considera muy rebajada y que, por ello, representaría una extraordinaria oportunidad «para complementar las colecciones del museo», añade. Giordano (Nápoles, 1634-1705) también conocido en España por su nombre castellanizado, Lucas Jordán, es discípulo de José de Ribera. Pese a que el pintor de Xàtiva es anterior, en su etapa final acogió en su taller a un jovencísimo Giordano que desarrolló luego un estilo muy inspirado por Ribera, según los expertos.

Llorens ofreció formalmente el cuadro, que representa a San Antonio de Padua, al ayuntamiento hace algo más de un año, en abril de 2019. Puso la pintura a disposición de los técnicos municipales para que la vieran personalmente. Y sugirió al consistorio que «es de vital importancia que la obra „de su propiedad desde hace diez años„ se quede en Xàtiva, para disfrute de sus vecinos y pese a que este precio [45.000 euros] está muy por debajo de su precio de mercado», dice. Es por ello, según consta en la instancia, que pide al ayuntamiento «que estudie la compra» por dicha cantidad más IVA a pagar «en dos anualidades», matiza.

Aunque la obra está en manos privadas, el cuadro permanece en Xàtiva. Pero de producirse la venta a otro particular o institución que no sea el ayuntamiento, la pieza «dejará esta ciudad tal vez ya para siempre», alerta el anticuario; algo que, según su criterio, el consistorio debería replantearse. Para reforzar la conveniencia de que el cuadro se quede, Llorens aporta un informe de valoración y una autentificación. «La obra representa un tema de enorme belleza, la aparición de Jesús y los ángeles a San Antonio», se indica. Mide 205 por 155 centímetros y cuenta con su propio marco de época. El óleo ha sido estudiado por el profesor Nicola Spinosa, del Museo de Bellas Artes de Nápoles y experto en Giordano, y por los también estudiosos de su obra Alfonso Pérez-Sánchez y Miguel Hermoso Cuesta. Spinosa destaca en un escrito el «óptimo estado de conservación» del cuadro y «la más que notable aportación al catálogo de Giordano» como pieza inédita que es.

El informe añade que varias obras de Giordano han alcanzado una considerable cotización en subastas en los últimos diez años: uno de idénticas dimensiones, El martirio de San Bartolomé, se vendió en 2012 en Christie's de Londres por más de un millón (1.130.574 euros). Otros lienzos de este pintor, vendidos igualmente en subastas de prestigio mundial como la citada Christie's o en Sotheby's se han vendido por entre 95.286 y 231.300 euros. Pero todos ellos de dimensiones muy inferiores al cuadro que todavía se conserva en Xàtiva.