Patricia Gimeno, Valencia

Década de los 60, un pequeño pueblo en el interior de Alicante y dos familias enfrentadas por la propiedad de unas tierras. Esos son los ingredientes esenciales de la L'alqueria Blanca, la serie revelación de Canal 9, un producto que nació sin grandes pretensiones y que ha sido capaz de doblar la cuota media de pantalla de la cadena. "A la gente le gusta la añoranza, el recordar tiempos pasados y esto es un elemento que funciona no sólo en series, sino también en programas" declara Paco López, uno de los guionistas de la L'alqueria Blanca preguntado sobre las posibles claves del éxito rotundo de la serie.

"El éxito nunca se espera porque nunca se sabe si va a funcionar un producto televisivo, los gustos son muy variados" afirma contundente Luís Eduardo Pérez, el segundo de los hombres que, junto a Manuel Valls, conforman el trío de guionistas. Todos ellos, como profesionales de la televisión, saben lo difícil que es sacar adelante hoy en día un proyecto como L'Alqueria Blanca. "Cuando comenzó l'Alquería habían triunfado muy pocos productos de ficción en TVV" comenta Pérez, "Nosotros tuvimos la suerte de que la serie tuvo una respuesta desde el primer día, a pesar de que el estallido que ha dado ahora era inimaginable", apuntilla Manuel Valls.

Los principios

L'alqueria Blanca surgió de la ilusión de un grupo de personas por reflejar la realidad de un pueblo valenciano, en una determinada época y con unos peculiares personajes. "La productora Univisión crea la serie y se le plantea a Canal 9. A la cadena le agrada la idea, y a partir de ahí se crea un equipo para desarrollarla", explica Luís E. Pérez. Pero como en cualquier trabajo, los comienzos nunca son tan fáciles como parecen. "Al inicio se tienen un montón de dudas, hay diferentes planteamientos y puntos de vista porque hay mucha gente que participa en el proyecto", cuenta Manuel Valls, "aún así, nosotros siempre hemos tenido el apoyo de la audiencia".

Gracias a este apoyo inicial, la serie ha terminado convirtiéndose en uno de los mayores éxitos de TVV, algo que era difícil de imaginar, como ellos mismos reconocen. "Nosotros en un principio pensábamos que esto iría destinado a zonas rurales y a una audiencia con un perfil de edad elevado" reconoce Paco López, "la gran alegría nos la llevamos al descubrir que se veía en las capitales y que la gente joven también la seguía" comenta orgulloso.

El éxito se lo achacan a esa apuesta por la realidad que es la serie en sí, y sobre todo al peso específico de todos los personajes. "Lo peculiar de L'alqueria es que no se crea una serie y luego los personajes, sino que primero se perfilan los personajes y tras ellos se crea una historia" recalca Luís Pérez. Y es que como ellos mismos afirman, nunca traicionarían a sus personajes porque ellos son L'alqueria Blanca.

Trabajo en equipo

Detrás de ese capítulo que la audiencia de Canal 9 puede disfrutar cada domingo, hay muchas horas de trabajo de decenas de personas que se desviven por sacar adelante l'Alqueria. "Trabajamos a unos ritmos frenéticos, lo que es normal en televisión, pero es que nosotros escribimos las escaletas y los diálogos de 2 episodios en una semana, es casi un milagro" admite Paco López, que parece no terminar de creérselo.

Admiten que el periodo en el que se desarrolla la trama de la serie (los años 60) da mucho juego pero también reconocen que L'alqueria Blanca no es una serie como Cuéntame que se basa en una cronología política y social que se sigue a raja tabla. "Nosotros jugamos a retratar bien esa época pero con una serie de conflictos universales, más allá de lo específico que ocurrió en una determinada época, nosotros trabajamos ese ambiente y lo reconstruimos", apuntala Luís E. Pérez.