De los nueve miembros que ayer se presentaron en la reunión del consejo rector del IVAM, apenas tres sobreviven desde el anterior, cuando el color del gobierno era otro. Sin embargo, pese a que la cifra sugiere una profunda renovación, solo se trató de un cambio de cromos. De los seis nuevos representantes, cinco pertenecen al cuerpo de la administración y vienen a sustituir a quienes les precedían por ocupar los mismos cargos en la Generalitat. Estos son el conseller de Cultura Vicent Marzà y los que le siguen en jerarquía en el ramo: Albert Girona, Josep Vidal y Carmen Amoraga; además de Purificación Pinter de la Abogacía de la Generalitat y Ángeles Cuenca como directora general del Sector Público.

Entre los nuevos solo Ángeles Vivancos, vicerrectora de la UPV, se puede considerar ajena a la administración, y su nombramiento se debe a la dimisión de otro independiente como José María Lozano. De los tres que se han quedado, José Luis Moreno es el director de CulturArts y los otros dos son la decana de la Facultad de Geografía e Historia, Ester Alba; y el propio rector del centro, José Miguel G. Cortés.

Por tanto, la balanza en la cúpula del IVAM seguirá volcada hacia la representación política, un desequilibrio que denunció el propio Cortés no hace tanto: en la última reunión del anterior consejo. Fue entonces cuando el director del centro reclamó que el núcleo con poder de decisión en el museo estuviera en manos de expertos en arte.

El cambio de gobierno no le ha traído a Cortés lo que demandaba y, por lo debatido ayer, la voz de los expertos se desplazará a un consejo asesor que se creará próximamente, como ya ocurre en el conglomerado de CulturArts.

Por lo demás, el primer consejo presidido por Marzà se instaló en el terreno de las intenciones, como quedó reflejado en el plan de adquisiciones, también reclamado por Cortés. Pese a que el nuevo consejo aceptó las líneas maestras expuestas por el director del museo, las adquisiciones serán propuestas primero por ese nuevo órgano asesor para volver después a la cúpula rectora, que tendrá que aprobarlas.

Sí se aprobó el programa de exposiciones de la temporada 2016/17. Además se valoró la creación del jardín de esculturas del IVAM en el solar de ampliación, aunque sin ningún compromiso de financiación.