El actor italiano Bud Spencer, nombre artístico de Carlo Pedersoli, falleció la noche del lunes a los 86 años, según anunció su hijo, Giuseppe Pedersoli, quien afirmó que murió acompañado de su familia en un hospital romano.

Spencer tuvo cierta relación con la Comunitat Valenciana. En 2004 recibió el premio Costa de Azahar del Festival Internacional de Cinema de Comedia de Peñíscola, municipio en el que inauguró las primeras jornadas gastronómicas de la localidad.

Emocionado por recibir el premio en el festival valenciano, Spencer aseguró que, en ese momento, aún le quedaban cosas por hacer: «Ser bailarín de ópera y jinete de caballos». El premio Costa de Azahar no fue el único presente que recibió Spencer en Peñíscola, sino que también fue obsequiado de manos del entonces alcalde de la ciudad, Andrés Martínez, con la silueta del municipio. En este sentido, el actor se comprometió a convertirse en embajador de Peñíscola allá donde fuera.

Cinco años más tarde, en 2009, el actor de Le llamaban Trinidad protagonizó un anuncio de Bancaja con el que la entidad bancaria promocionaba su compromiso por el buen funcionamiento de los cajeros. En el spot, de 44 segundos, una voz en off señalaba las consecuencias de que un cajero Bancaja no funcionara cuando Spencer fuera a sacar dinero y si, al tener que sacarlo en otro, le cobraran una comisión extra. Un Spencer enfadado atraviesa las calles propinando sus célebres golpes —con los míticos sonidos que acompañaban a los tortazos en sus películas— a cada transeúnte que se cruza por su camino.

Bancaja, señaló al anunciar esta campaña publicitaria, que escogió a Bud Spencer como protagonista por considerarlo «un personaje mítico y reconocible por sus características películas, que cuenta con la admiración de muchos españoles».

La versión cómica del «western»

El actor fue conocido por ser el gigante bueno en algunos de los llamados spaghetti western, las versiones de ese género rodadas en muchas ocasiones en el sureste de España y especialmente su versión cómica junto con Mario Girotti, el verdadero nombre de Terence Hill. Su dúo con Hill fue el que le catapultó a la fama dando lugar a un auténtico genero con películas como La colina de las botas (1969), Le llamaban Trinidad (1970) o Le seguían llamando Trinidad (1971). En los últimos años rodó Cantando dietro i paraventi di Ermanno Olmi (2003) y algunas serie para la televisión.

Gran deportista, fue campeón mundial de natación en 1984 y participó representando a Italia en los Juegos Olímpicos de Helsinki de 1952, en los de Melbourne de 1956 y en los de Roma de 1960. Carlo Pedersoli también quiso dar el salto a la política y se presentó en 2005 a las elecciones regionales del Lazio en las listas del partido de Silvio Berlusconi, pero no fue elegido.