Fernando Cayo lleva los fines y los medios de Maquiavelo al Talia

Fernando Cayo subió ayer a escena en el Teatro Talia de València a un Nicolás Maquiavelo vestido como Don Drapper para hacerle un traje a la clase política de cualquier época sin dejar de usar las mismas palabras que el pensador florentino dejó escritas en el siglo XVI. La obra - dirigida y escrita por Juan Carlos Rubio- estará en la sala de la calle Caballeros hasta el próximo 10 de diciembre.

Rubio usa fragmentos de los Discursos sobre la primera década de Tito Livo, Del arte de la guerra y del propio Príncipe, además de la correspondencia personal de Maquiavelo para reflexionar sobre el poder, los políticos y los ciudadanos. «La actualidad política me llevó a la necesidad y El Príncipe me dio la solución», resumía ayer el director en la presentación de su obra en València. «La actual situación política en España hace que la gente esté deseosa de un espectáculo de este tipo -añadió Rubio-. El público ya tiene suficiente atontamiento con la televisión». «Muchas de las frases» que pronuncia Cayo en su interpretación son oraciones que «parecen escritas esta mañana y que parece que suenen en el Telediario del mediodía porque muchas cosas siguen estando de rabiosa actualidad», agregó.

«Juan Carlos ha hecho un espectáculo muy redondo -añadía por su parte Fernando Cayo-. Sin trastocar lo que tiene de filosofía y sin traicionar al hombre, ha mantenido su ironía y su sentido del humor, y está cargado de cosas muy emotivas y muy humanas».

Para el director, la obra de Maquiavelo sirve tanto para «dar consejos a los gobernantes» como «para que los ciudadanos sepan la manera en la que estos actúan».