La película que se inspiró en el día a día del club Aderes de Burjassot se llevó el Goya a la Mejor película de la 33.ª edición de la fiesta del cine español. Campeones, de Javier Fesser, superó a El Reino, la radiografía sobre la corrupción política de Rodrigo Sorogoyen, con una historia de superación que también se ganó el favor de los espectadores. De hecho, Campeones era la única película de su categoría que ha recaudado en taquilla más de lo que costó.

La cinta se llevó tres de los 11 galardones a los que aspiraba y protagonizó uno de los momentos más emotivos de la noche, cuando el actor Jesús Vidal subió al escenario para recoger el Goya al actor revelación. «Señores de la Academia, acaban de distinguir a un actor con discapacidad. Ustedes no saben lo que han hecho. Me vienen a la cabeza tres palabras: accesibilidad, inclusión y visibilidad. Este galardón también es para mis nueve compañeros de la película. Sin nuestra frescura y espontaneidad esto no hubiera sido posible», dijo el actor, quien también dedicó el galardón a sus padres. «A mí también me hubiera gustado tener un hijo como yo, porque tengo unos padres como vosotros». Vidal puso al público en pie.

El Reino fue la triunfadora de la noche al llevarse siete de los 13 premios a los que aspiraba, entre ellos el de Mejor dirección para Sorogoyen y el de Mejor guion original. Antonio de la Torre se llevó el Goya al Mejor actor por El Reino y Susi Sánchez a la Mejor actriz por La enfermedad del domingo.

Una de las sorpresas de la noche fue el premio a Carolina Yuste, actriz de reparto de Carmen y Lola. «Estoy feliz de hacer un proyecto donde el 70 % del proyecto son mujeres en puestos con decisión», aseguró la actriz. Otro de los momentazos de la gala lo protagonizó Eva Llorach, Goya a la Mejor actriz revelación por Quién te cantará, que pidió que se levantaran todas las mujeres del auditorio. «Sois muy pocas y quiero compartirlo con vosotras. Cread historias con protagonistas femeninas, sobre todo porque a partir de los 40 dejamos de existir. El cine puede cambiar las cosas». La actriz Belén Cuesta también se sumó a la reivindicación: «Qué levante la mano quien no haya cobrado menos que su compañero», dijo durante los primeros minutos de la gala.

Actuaciones y comedia

La música fue la gran protagonista de una gala que quería ser viral hasta rayar lo absurdo. Una batucada, una tuna, un grupo de danza urbana... Se salvaron las actuaciones de Rosalía -que cantó el tema «Me quedo contigo» junto a l'Orfeó Català- y la del trío formado por Rozalén, Amaia Romero y Judit Neddermman. En la gala tampoco faltó el humor. Andreu Buenafuente y Silvia Abril demostraron su buen hacer al frente de la ceremonia, aunque quedaron eclipsados por Berto Romero y David Broncano, quienes quedaron suspendidos en el aire y vivieron más que un incidente. La visita más cómica fue la del valenciano Màxim Huerta. «No se preocupen. Saben que yo soy breve», en relación a su corta etapa como ministro.

El homenajeado de la edición, Chicho Ibáñez Serrador, no acudió a la gala. En su lugar, subieron al escenario un grupo de cineastas a quienes influyó. «Revolucionó la televisión en España y acercó el lenguaje televisivo al lenguaje del cine», aseguró Juan Antonio Bayona. «Es un creador de pesadillas único y original. Nosotros siempre hemos reconocido su influencia», añadió el cineasta valenciano Paco Plaza.