La alfombra roja más popular del Séptimo Arte se despliega esta noche (madrugada, hora española) en el Dolby Theatre de Los Ángeles. El auditorio acogerá la 91 entrega de los Premios Óscar, en la que será su gala más atípica, al menos de los últimos 30 años pues desde 1989 que la ceremonia no se había quedado huérfana de presentador. Lejos quedan aquellas ediciones en las que Billy Crystal era el maestro de ceremonias con notable éxito de crítica. No le faltaba experiencia pues los condujo en hasta nueve ocasiones. Para esta edición la polémica pilló a la Academia sin «plan b». Los chistes homófobos del que iba a ser su presentador, el actor Kevin Hart, y su posterior renuncia les ha obligado a tirar del star system y de personalidades de otros ámbitos -como la tenista Serena Williams- para entregar las estatuillas.
Pero las polémicas decisiones no quedaron ahí y la Academia decidió que algunos de los premiados se anunciarían en los descansos publicitarios. Finalmente, revocaron esta iniciativa ante el grito en el cielo que pusieron algunos cineastas del Olimpo hollywoodiense como Martin Scorsese y Quentin Tarantino. Uno de los nominados que pueden llevarse el Óscar en una de estas categorías es el español Rodrigo Sorogoyen por su corto de ficción, Madre.
No serán unos Óscar al uso si una de las favoritas, Roma, de Alfonso Cuarón, logra hacerse con el galardón a la mejor película (está en las quinielas de otras nueve candidaturas). Su nominación ya hizo historia al ser la primera película de habla hispana en aspirar a lograr el máximo reconocimiento de la noche. No es el único hito que ha batido el director mexicano, pues la producción sitúa a Netflix -plataforma que la ofrece en su catálogo- al mismo nivel que las salas de cine.
Roma se disputa su puesto de favorita precisamente con La favorita, del griego Yorgos Lanthimos, mientras que Rami Malek ya lo ha ganado todo (Globo de Oro, Bafta y Sindicato de actores) por su interpretación de Freddie Mercury en el biopic más taquillero ya de la historia, Bohemian Rhapsody. Será este, además, el tema que la banda británica interprete al comienzo de la gala. A Malek solo le queda ya conquistar el Óscar. Si algo puede empañar su noche es que las acusaciones de abuso sexual del director de la cinta, Bryan Singer, influyan en la decisión de los académicos.Quien también acaricia el Óscar es Glenn Close, solo que la actriz ya lleva siete nominaciones a los premios de la Academia y ningún premio. Este puede ser su año con Una buena esposa.
Presencia española
Rodrigo Sorogoyen se verá arropado esta noche por algunos compatriotas que asistirán a la ceremonia. Dos de ellos llegarán incluso a subirse al escenario para anunciar los nominados, como Javier Bardem o el cocinero José Andrés. Otros, en cambio, solo asistirán en calidad de acompañantes como la actriz Ariadna Gil, que acompañará a su pareja, Viggo Mortensen, nominado por su papel en Green Book.
