Álex Serrano

valencia

Ni en sus mejores sueños esperaba Manuel Hussein un partido como el de ayer, un debut así. El Power Electronics arrolló al CB Granada con un claro 104-81, consiguiendo así la decimoquinta mejor anotación de la historia del Valencia Basket en una primera jornada. Con Rafa Martínez en plan estelar y Dusko Savanovic encontrando el aro con facilidad, una buena defensa fue la clave de la victoria. Con jugadores como ellos dos enchufados, bastaba estar fuertes detrás para acabar con un equipo como el nazarí, al que aún le queda mucho trabajo por delante.

Poco le costó al Power encontrarle el ritmo al partido. Bajo la pausada y eficaz dirección de Cook, el quinteto inicial se hizo enorme. No había manera de para a Lishchuk, y eso que Trifón Poch puso en pista a Paulo Prestes, el gigante brasileño. En el perímetro, Martínez y Richardson le tomaron pronto la medida a la línea de 6,75, y Savanovic pronto hizo que la grada cantara aquello de "Dusko, Dusko, Dusko abusón". Con Korolev en el banco por dos tempranas personales, el Cebé no encontraba la manera de desarbolar la defensa de Hussein. Únicamente después de un tiempo muerto de Poch, cuando el marcador señalaba un 16-6, pudo Granada acercarse en el marcador. Se sentaron entonces Cook y Richardson, y salieron a pista De Colo y Claver. Poco después debutó Javtokas, en un intento de Hussein de detener a Prestes, que ya había puesto en problemas a Claver en un par de ataques. El lituano debutó en medio de una ensordecedora ovación, lo que da una pista de las ilusiones que tiene La Fonteta puestas en el pívot. El base francés tuvo que volver pronto al banquillo con dos rápidas personales, pero el Power mantuvo el tipo y el segundo tiempo comenzó con el equipo valenciano 6 arriba: 28-22.

El segundo cuarto no supuso un cambio importante. Javtokas acumuló minutos y demostró lo que puede dar al equipo. Rafa Martínez demostró por qué es uno de los mejores triplistas de la ACB y acabó el periodo con 17 puntos. Los ataques del Power, comandados por José Simeón, encontraban aro con mucha facilidad, mientras que los de Granada se estrellaban en la espectacular defensa del conjunto valenciano. Así las cosas, al descanso se llegó con un 54-37 en el marcador que auguraba una plácida victoria y, lo más importante, con dos estados de ánimo muy distintos: mientras que el Power estaba pletórico y lo estaba haciendo casi todo bien -Richardson y Simeón tenían ya tres personales-, al Cebé se le había ido la luz.

El descanso no les sirvió de nada a los andaluces. Pero más por deméritos suyos, por méritos del Power. El equipo valenciano no aflojó el ritmo y continuó anotando casi en cada ataque. Si no era Martínez el que miraba a canasta desde la línea de tres, lo hacía Savanovic, y si el balón llegaba a la pintura, Robertas Javtokas se veía casi solo para levantarse y anotar canastas fáciles. El partido estaba muy de cara para el Valencia Basket, mientras que por el Cebé únicamente samba metía miedo en La Fonteta. Pero ni por esas. El partido estaba roto, destrozado, así como el Cebé, un equipo muy simple en sus planteamientos que nunca puso en problemas a los de Manuel Hussein, que firmaron un parcial de 28 puntos en este periodo para que el inicio del último viera a los valencianos 25 tantos arriba: 82-57. Uno de los jugadores más importantes del cuarto y, por extensión, del partido, fue Robertas Javtokas. Ya había avisado Hussein el viernes: "Aun al 60%, Javtokas nos dará mucho". Y vaya si dio. Aportó, además de mucha fuerza en la pintura, seguridad en el rebote, que falta le hacía al Power después de la Supercopa.

Al poco de comenzar el último periodo, Lishcuk cometió dos faltas en muy poco tiempo y se fue al banquillo eliminado. Volvió el lituano a pista, junto a De Colo, Simeón, Claver y Marc Fernández -en quien Hussein confía mucho más de lo que Spahija lo hacía en Iván García- para rematar el partido y dejar la primera victoria en casa. Pero lo importante ya no era ganar, sino hacerlo bien. Sin Martínez y Savanovic, referencias ofensivas del equipo, en el parqué, la anotación se resintió, pero ni siquiera ese pequeño bajón sirvió para que el Cebé despegara y diera muestras de querer, o poder, llevarse el partido. Sólo Kurz era regular en ataque, y en el banquillo visitante las caras eran larguísimas. Tan bien iba el partido que Hussein sacó a pista a Juanlu Navarro para dar descanso a Savanovic. La Fonteta era una auténtica fiesta. El Power llegó a los 100 puntos con un canastón de Nando De Colo. Por aquí, por allá, por delante, por detrás, pase por la espalda, penetración en la zona y bandejita para dejar claro algo de este equipo: no va a faltar claridad ofensiva. Granada sabía que lo iba a tener complicado, pero no que le iba a caer encima toda una máquina ofensiva que no había manera de parar. La anotación más alta de la jornada para un Power que empezó con mejor pie imposible un mes de octubre que se le antoja complicadísimo. Pero con 104 puntos en el primer partido, todo se ve con más confianza, con más tranquilidad. Ahora, el equipo ya piensa en Bilbao Basket.

Hussein deja la puerta abierta a un fichaje

El entrenador del Power Electronics, Manuel Hussein, señaló que el encuentro vino marcado "por el acierto ofensivo" y comentó que hubo momentos, "con parciales de cuatro o cinco canastas", que podrían haber "evitado" e insistió en el tema del rebote defensivo". Hussein volvió a repetir que el equipo está "muy lejos" de ser lo que quiere ser, pero alabó "la actitud del equipo en defensa": "De aquí hasta ser regulares nos queda un camino largo". Sobre James Augustine, Hussein indicó que si aparece algo "bueno" en el mercado, "el club está atento a ello", aunque insistió en que el Power "puede esperar" por el ala-pívot americano.

Por su parte, Trifón Poch comentó que el partido "debe servir como experiencia" para que "algunos jugadores se den cuenta de que están jugando en la ACB".

José Simeón se retiró con un golpe en problemas en el tobillo tras un fuerte golpe.