«Es una grandísima persona». La frase viene directa del entorno de Jaume Ponsarnau (Tàrrega, 1971), el nuevo entrenador del Valencia Basket. De Manresa, concretamente, donde el técnico catalán dejó un profundo poso de bonhomía. «Ningún jugador habló mal de él. Es un gran profesional que sabe gestionar el factor humano», añaden desde los círculos del Basket Manresa, la escuela en la que se formó Ponsarnau como entrenador de élite.

Ponsarnau vivirá su tercera temporada en el Valencia Basket, la primera como cabeza del cuerpo técnico. Llegó hace 2 años de la mano de Pedro Martínez, con quien coincidió en Manresa. «Merecídisimo, Jaume head coach», escribió ayer el ex técnico taronja en su cuenta de Twiter. Un mensaje de reconocimiento a un aprendiz convertido, ahora, en maestro.

Ponsarnau, que hoy será presentado, continuará viviendo solo en València. Su mujer es maestra de un colegio, el Paidos, en Sant Fruitós de Bages, cerca de Manresa. Es la misma escuela a la que van sus tres hijos y dónde se crió, también, Rafa Martínez. El vínculo entre el entrenador y el capitán del Valencia Basket es tan estrecho como pretérito. Martínez fue una de los jugadores con los que subió al CB Manresa a la Liga ACB en la temporada 2006-07. Javi Rodríguez, base del equipo catalán, entre otros, aseguró cuando se retiró que Jaume Ponsarnau le cambió la vida. Para bien, por supuesto.

Desde la esfera que vio progresar al técnico catalán aseguran que el nuevo inquilino del banquillo de La Fonteta es un entrenador «muy didáctico». «Tiene mucho discurso. Es una persona muy seria con su trabajo y siempre quiere seguir aprendiendo», apuntan.

El nombramiento de Porsanau acelerará, seguro, la renovación de Rafa Martínez, de baja los próximos 5 meses tras ser operado la pasada semana por una lesión de rodilla. Su conocimiento de la plantilla y del club son factores irrefutables en su «fichaje». Nadie mejor que él para darle continuidad al proyecto deportivo que tiene como objetivo principal la vuelta a la Euroliga.

La segunda experiencia de Ponsarnau como segundo entrenador fue en Giupuzkoa, al que dirigió una temporada y media. También fue seleccionador sub-20 y ayudante de la selección absoluta, con la que ha sumado un bronce y un oro en el Eurobasket y otro bronce en los Juegos de Río.

Junto a Chechu Mulero, director deportivo, Ponsarnau empezó ayer mismo a bocetar la plantilla de la próxima temporada. Una de las primeras decisiones que han de tomar es si cuentan o no con Guillem Vives, que ha pedido la renovación.