El Mestalla se llevó ayer el derbi de filiales al vencer al Levante en el Ciutat, gracias a un gol de penalti marcado por Racic en el último minuto de partido. El Atlético Levante, que tuvo su ocasión también de penalti por medio de Juan Delgado en el Minuto 92, perdonó su ocasión.

Hasta el tanto del Mestalla, el de ayer fue el derbi de las oportunidades falladas. El carrusel de llegadas y ocasiones de gol en los palos de Cárdenas y Cristian fue una constante durante los noventa minutos. Desde las que tuvo Merentiel en la recta final del primer tiempo, en una jugada de tres contra uno que detuvo Cárdenas, o las que salvó el valencianista Guillamón bajo palos con su portero batido, pudieron valer el gol decisivo.

En un final de infarto, Racic marcó de penalti lo que parecía la victoria valencianista. Pero, a renglón seguido, el Levante desaprovechó su ocasión desde los once metros.