RC Celta DE VIGO/Villarreal CF

celta. Rubén Blanco, Hugo Mallo, Costas, Okay, Maxi Gómez, Aspas (Cabral, min. 89), Hoedt, Lobotka, Lucas Olaza (Kevin, min. 87), Boufal (Sisto, min. 75) y Brais Méndez. Villarreal. Asenjo, Mario, Álvaro, Víctor Ruiz, Quintillà (Raba, min. 87), Pedraza, Morlanes (Bacca, min. 82), Iborra, Cazorla, Chukwueze (Fornals, min. 70) y Ekambi. Goles. 0-1, min. 11: Ekambi. 0-2, min. 15: Pedraza. 1-2, min. 50: Iago Aspas. 2-2, min. 71: Maxi Gómez. 3-2, min. 85: Iago Aspas, de penalti. a ÁRBITRO: Gil Manzano, del colegio extremeño, asistido por Nevado Rodríguez y Martínez Nicolás. TA T. amarillas: A los locales Hugo Mallo; y a los visitantes Víctor Ruiz, Mario y Pedraza. e Estadio: Balaídos.

El fútbol es un espectáculo asombroso. No hay guion ni ficción que resista los giros y las emociones de la realidad de la pelota. El Villarreal se marchó ayer 0-2 al descanso en Balaídos, tranquilo. El Celta se levantó de la lona en el segundo tiempo y volteó el partido. El 3-2 encumbra a Iago Aspas al estatus de leyenda y condena al Villarreal al sufrimiento. El equipo de Calleja sigue fuera de la zona de descenso, con un punto de margen, pero desperdició, con todo a favor, una ocasión única.

La palabra es asombroso. El fútbol es un deporte que se juega con el pies, y tal vez por eso casi nunca tenga sentido. El fútbol elige su propio camino. El Celta encaró el duelo contra el Villarreal, el combate de equipos en la zona baja, abrazado al ritual y la épica. En el minuto 10, el Villarreal ganaba 0-1. En el minuto 15, el Villarreal ganaba 0-2. Había domado ese espíritu. Cuando más apretaba el estadio, halló la precisión y la calma. Después, cuando lo tuvo todo a favor, inexplicablemente se deshizo. En el minuto 50, Iago Aspas marcó el 1-2. En el minuto 71, Maxi Gómez empató el partido. En el 85 y tras una larguísima consulta con el várbitro, Iago firmó de penalti el 3-2 definitivo. Difícil contarlo desde la razón y la lógica. Un asombroso partido.

El fútbol es un capricho y elige su propio camino. El fútbol va de los futbolistas, de aprovechar el momento. El Villarreal sacó el mazo en Balaídos para machacar al Celta, pronto precipitado, pero se le olvidó abrochar el partido.