El Villarreal es una de las sensaciones de LaLiga. El Submarino logró un punto contra el Madrid pero la sensación es que el conjunto blanco se marchó con un premio que no mereció. Los cambios y sobre todo el nivel en la última media hora dejó claro que el triunfo debía quedarse en casa. Aunque eso no sucedió, la realidad es que en el conjunto dirigido por Emery todo son buenas vibraciones. Y ya no solo por los titulares, sino porque existen muchas y buenas noticias en torno a una plantilla que siempre tiene soluciones para todo. Entre otras cosas, a la ausencia incluso de un jugador como Paco Alcácer en un día clave como el del sábado.

Bacca fue la elección final de Unai Emery contra el Madrid y eso explica, entre otras cosas, que el entrenador prima el equilibrio. Con Gerard Moreno y Bacca, el equipo sigue teniendo a ese conector en ataque gracias al primero y al jugador que ataca espacio y hace de rematador en el caso del segundo. Con Trigueros, Moi y Parejo como centrocampistas, más Moi en izquierda como cuarto medio pero hombre de banda, Gerard es siempre un factor sorpresa para la defensa rival. Puede aparecer por fuera o por dentro y eso lo equilibra, en la mayoría de las ocasiones Trigueros. Además, en el banquillo aparece el factor revulsivo como es Chukwueze o Kubo, jugadores mucho más verticales que pueden aportar en cualquier momento.

Y ese fue el caso en el duelo ante el Madrid. Entró el nigeriano y también lo hizo Yeremy por izquierda. Ambos aportaron muchísimo al ataque y eso es una de las notas positivas de este arranque de curso con Unai. Los suplentes aportan y la rotación con Europa League está siendo una buena noticia. De hecho, otro de los cambios fue Estupiñán. El ecuatoriano saltó al césped para convertirse en un atacante más. Generó el pase del penalti, un pase claro a Parejo y participó en fase ofensiva para poner en apuros al Madrid. Tanto Pedraza, anteriormente, como él, dejan el lateral en buenas manos. Esa competencia está siendo una de las notas positivas en este arranque de curso. El cuadro amarillo fue capaz de ‘convivir’ con la baja durante dos partidos y ahora con la de Paco una en ataque.