El mercado transcurre en Orriols sin novedades más allá del culebrón Morales, un caso que podrá resolverse o no de aquí a junio pero en el que se da por seguro que la puerta de salida seguirá cerrada en enero. De hecho, los planes del Levante pasan por no desprenderse de él ni de nadie. Sin ofertas en el horizonte que inviten a la duda, la única alternativa pasa porque sea alguno de los jugadores que menos minutos acumula quien se dirija al club en busca de una solución. Por ahora no lo ha hecho ninguno, aunque basta con recordar lo que ocurrió hace un año, cuando se desató una tormenta el último día con los traspasos de Oier y Cabaco más el fichaje de Bruno y la repesca de Koke Vegas.

Renovaciones

A lo que no se ha cerrado el Levante es a reforzarse, tal y como en sus últimas comparecencias ha admitido Paco López. Sin embargo, ninguna candidatura ha pasado de momento el corte. Económicamente no se llega al millón, un margen que no da para florituras pero con el que sí que puede haber suficiente para apuntalar el filial, en apuros por la permanencia. La demarcación con más urgencia continúa siendo la del delantero, aunque el paso de Sergio León ha aliviado esa necesidad. A partir de ahí los ojos están puestos más en el verano y eso va también por el asunto de las renovaciones.

Opcionales

Además de Morales, en junio acaban contrato Rochina y Miramón aunque también pueden hacerlo Sergio Postigo, Óscar Duarte y Toño, cuya continuidad está vinculada a objetivos por partidos que aún no cumplen. El que más cerca está es Postigo, al que le sobra con participar en 25 encuentros con un mínimo de 45 minutos y lleva 12. También Duarte tiene a tiro una temporada extra, mientras que a quien se le complica más es a Toño. El lateral renovó por dos temporadas fijas y dos opcionales siempre y cuando participase en 75 partidos oficiales y lleva 45 después de haberse visto relegado por Clerc.

Planificación

La única negociación que se ha cerrado en lo que va de temporada es la de Roger, al que se ha blindado con una temporada adicional. No hay novedades de momento con Miramón, aunque la idea es negociar y a priori no será complicado. Se continúa igual con Rochina, que parece más fuera que dentro.

El tema estrella, sin embargo, es el de Morales, si bien en este momento ni siquiera la continuidad del área deportiva está garantizada por escrito.