El España-Alemania de mañana domingo en Doha será un enfrentamiento de máxima tensión. La clasificación exige a los alemanes a, como mínimo, no perder o estarán fuera del Mundial de Qatar 2022, tras el traspié ante Japón . Por el contrario, para el combinado español es una ocasión de oro de clasificarse para los octavos de final y apear a una de las selecciones a priori favoritas. Un duelo caliente y con precedentes que aún le echan más leña al fuego.

Los jugadores, ayer con el chef Salt Bae

La base de españoles y alemanes es el Barça y Alemania, respectivamente. Los últimos duelos entre barcelonistas y bávaros aún colean y los jugadores culers tienen una ocasión de oro de saldar cuentas.

España tiene ocho internacionales blaugrana (Eric, Alba, Balde, Busquets, Pedri, Gavi, Ferran y Ansu) y Alemania cuenta con siete efectivos del Bayern ´Múnich (Neuer, Kimmich, Goretzka, Gnabry, Müller, Musiala y Sané).

En dos años y medio, Barça y Bayern se han enfrentado en cinco ocasiones con un balance sangrante: cincovictorias alemanas y un 19-2 en la cuenta de goles a favor y en contra. Esta misma temporada, el Barça perdió 2-0 en el Allianz y volvió a caer en el Camp Nou por 0-3. La temporada pasada se repitió la historia y llegó una doble derrota en la fase inicial por 3-0. Peor fue en los cuartos de final en 2020. En el encuentro durante la pandemia del covid disputado en Lisboa, el FC Barcelona cayó por un estrepitoso 2-8 en los cuartos de final de la Champions League a partido único.

Sentido opuesto

En el otro lado de la balanza están los resultados recientes de España ante Alemania. La Roja no pierde con su rival de mañana desde hace nada menos que 34 años en un partido oficial, concretamente en la Eurocopa de 1988 con una derrota por 2-0 en Múnich. Desde entonces, la selección ha disputado cinco partidos oficiales, con tres victorias y dos empates.

Dos triunfos de especial valor ya que uno fue en la final de la Eurocopa del 2008 disputada en Viena con el gol de Ferran Torres y otro en la semifinal del Mundial del 2010 con el vuelo de Carles Puyol. El último precedente fue sangrante con un 6-0 en La Cartuja en al UEFA Nations, ya con Luis Enrique, en plena pandemia y con un Ferran Torres espectacular, autor de tres goles.

Los emaptes fueron en el partido de ida de la UEFA Nations League 2020, con un gol en el descuento de Gayà, y en el Mundial de Estados Unidos en 1994 con un golazo de Goikoetxea en un centro-chut.

La última derrota fue por 2-0 en un Alemania-España de la Eurocopa de 1988 en la que el conjunto español cuajó un papel decepcionante y cayó a las primeras de cambio. Por tanto, son 34 años desde la última derrota en un partido oficial.

Un equipo con el orgullo tan subido como el germano tiene muy presentes estos precedentes y también quiere evitar la humillación vivida hace cuatro años en Rusia. Alemania no pasó entonces de la primera ronda, pese a que llegaba como defensora del título del 2014. Una derrota la dejaría fuera en un grupo en el que era junto a España la clara favorita para pasar. Nadie creía que Japón pudiera derrotarles en la jornada inaugural y jugarse el devenir en la competición frente a una selección español que llega con la flecha hacia arriba.