Las diferencias de Lucho a Luis

España seguirá basando su juego en el balón, aunque con el pivote más reforzado y sin extremismos, con más tolerancia en el error

Luis de la Fuente, en el entrenamiento de ayer.

Luis de la Fuente, en el entrenamiento de ayer. / Jordi Gil. Las Rozas

Jordi Gil

Con Luis de la Fuente no llega la revolución a La Roja, pese a los 15 cambios respecto a la lista del Mundial, pero sí que se apreciará un ‘libreto’ distinto al de Luis Enrique.

1 Factor motivacional

Lucho era muy visceral en sus arengas. No se guardaba nada. Sus gesticulaciones y mensajes tenían una carga visible para que calaran en los jugadores. Es un técnico de carácter y lo demostraba. De la Fuente, por su parte, cree mucho en las frases profundas. Le gusta prepararse alguna sentencia especial para cada ocasión. Es una persona muy religiosa y en muchas ocasiones se inspira en su fe para articular su discurso. Trata de llegar al corazón.

2 Método

Luis Enrique aplicaba sistemas muy novedosos y sorprendentes. Desde el andamio a sus inicios a acabar comunicándose con ‘walkie-talkies’ con sus jugadores en la sesiones. También instaló para algunas sesiones de Las Rozas una pantalla gigante para ver acciones tácticas in situ. De la Fuente es más tradicional en su forma de trabajar. La metodología de la Federación es moderna, a nivel de análisis y de control médico de los jugadores, pero no llega al extremo del asturiano. Sus sesiones son con mucho balón.

3 Táctica

El exseleccionador era intransigente con el 4-3-3. No cabía otro sistema táctico en su plan. Fue inflexible y al equipo en ocasiones le faltaron alternativas. De la Fuente, en cambio, ha jugado más a menudo con el 4-2-3-1. Entiende que la idea es más importante que el dibujo y el propósito es dominar al rival con el balón. El medio centro es una figura esencial, acompañado de otro medio un poco más libertado y constructivo. También le gusta el falso ‘9’, pero no le duelen prendas si debe jugar con un delantero centro nato. Ahí están Joselu y Borja Iglesias como muestra.

4 Disciplina

Luis Enrique era un técnico rígido. Ya no solo en el comportamiento en el campo, sino también fuera del terreno de juego. Si le ponía la cruz a un futbolista, éste no volvía a la Roja, Así pasó por ejemplo con Nacho, tras un mal partido ante Inglaterra, o con Fabián después de la Eurocopa. De la Fuente también tiene mucha personalidad y no se corta si debe hacer alguna reprimenda. Sin embargo, no pasa facturas tan altas. Con Asensio tuvo sus diferencias, pero lo llevó a Tokio y a Unai Simón le devolvió la titularidad, pese a unos errores iniciales.

5 Staff

Luis Enrique tenía un grupo muy cerrado. Joaquín Valdés, el psicólogo, le acompañó desde su etapa en el Barça B y a él se sumó más tarde el preparador físico Rafael Pol. Eran sus más fieles colaboradores. A ellos sumó Aitor Unzué.. El trato con el asturiano llevaba a veces a mucho desgaste y saltaron figuras de su equipo técnico. En apenas un año, por ejemplo tuvo a tres entrenadores de porteros: Ochotorena, José Sambade y Juanjo González. De la Fuente es más permeable con los trabajadores de la Federación. Está habituado a alternar segundos y en distintas fases de la sub-21 tuvo a Santi Denia o Julen Guerrero.

6 Institucional y medios

Luis Enrique se ceñía a su trabajo, a pasar muchas horas en la oficina de Las Rozas o con reuniones telemáticas. No participaba en actos promocionales y en pocos institucionales. Con los medios cumplía en las ruedas de prensa, pero se le notaba a menudo incómodo y llegó a recurrir al Twitch para comunicarse. De la Fuente entiende su cargo de una manera más extensa. Representa a la RFEF y trata de ser natural y cordial con los medios.