‘Overbooking’ en el centro del campo del Villarreal

En el esquema de Quique Setién el centro del campo suele estar formado por tres futbolistas. El atractivo y ofensivo sistema 4-3-3 que emplea el entrenador del Villarreal CF destaca por contar con un mediocentro canalizador en el eje, escoltado a sus costados por dos interiores mixtos, jugadores que a la vez manejan bien el balón y, además, ofrecen trabajo, sacrificio y buenas prestaciones en cuanto a la recuperación del balón.

Con vistas al próximo ejercicio 2023/24, el Submarino mantiene a todos los centrocampistas que concluyeron la pasada campaña, a excepción de Giovani Lo Celso, que estaba cedido por el Tottenham y regresa a Londres, ya que ninguno termina contrato. Además, el club ejercerá la opción de compra por Ramón Terrats, de 2.5 millones de euros, apuntalando la medular con un joven jugador capacitado para ocupar las tres posiciones del centro del campo de Setién. A su vez, van a llegar a partir del 1 de julio a coste cero, tras terminar sus respectivos contratos con sus antiguos clubs, Denis Suárez y Santi Comesaña. Al igual que Vicente Iborra (con contrato hasta el 2024), que al no ascender el Levante a Primera División no se ejecuta la opción de compra automática de un millón de euros.

El conjunto amarillo, por tanto, tiene un exceso de peloteros, de jugones, aunque bien es cierto que Álex Baena, Manu Trigueros y Denis Suárez son muy polivalentes y pueden jugar en posiciones más avanzadas. Aunque cierto es que, sobre el papel, Setién no quiere tener 9 jugadores en plantilla que opten a 3 posiciones. De hecho, el técnico santanderino del Submarino ya indicó al finalizar el ejercicio 2022/23 que en ciertas zonas del campo, refiriéndose a la medular, tiene exceso de futbolistas.