La 'Messimanía' se desata en Florida

El Inter de Miami no ha puesto el nombre de Lionel Messien el anuncio oficial de The Unveil (algo así como ‘La revelación’), el acto que se celebra este domingo en el estadio DRV PNK de Fort Lauderdale (Florida). No hace falta. La presentación del astro argentino es el evento más esperado para los fans del fútbol y especialmente en el sur de Florida, donde la Messimanía que se ha desatado desde que se conoció su fichaje el 7 de junio está disparada y, a veces, hasta disparatada.

La fiebre por La pulga es total en el área de Miami y Fort Lauderdale, donde viven más de 100.000 de los aproximadamente 300.000 argentinos que residen en Estados Unidos. Y la alcaldesa del condado de Miami Dade, Daniella Levine Cava, espera que Miami, conocida como “la capital de Latinoamérica”, se ratifique ahora también como “la capital del fútbol de Estados Unidos”.

En el restaurante The Knife han creado el Messi mojito. Una cervecería local ahora distribuye latas con el número diez y los colores rosa y negro, los del club donde volverá a coincidir con Gerardo ‘Tata’ Martino y su compañero del Barça Sergio Busquets. Otro local de argentinos, el Karnitas 71st, ha empezado a servir una milanesa bautizada Mila Messi. Y el plato favorito del futbolista, o al menos su estilo empanado, también se ha colado en el nuevo sandwich que el propio futbolista lanzó el miércoles con la cadena Hard Rock para celebrar su llegada a la liga estadounidense MLS.

Las calles rebosan Messi. Al mural que desde 2018 le dedicó el restaurante Fiorito se han ido sumando más, y más grandes, como uno gigante realizado en el hip barrio de Wynwood por el artista Maximiliano Bagnasco, donde estuvo viendo desde una grúa cómo se daban los últimos retoques David Beckham, uno de los propietarios del Inter. Y también allí se retratan ahora los fans frente al de Arlex Campos, que ha pintado al flamante campeón del mundo con una camiseta donde el albiceleste va mutando hasta el rosa.

Cada paso, un acontecimiento

Cada uno de los pasos de Messi se ha convertido en fenómeno informativo, viral y para sus aficionados desde que aterrizó el martes en un avión privado en el sur de Florida, donde tiene cuatro apartamentos en propiedad, incluyendo dos en lujosas torres en Sunny Isles, 17 kilómetros al norte de Miami Beach y 26 al sur del que será su nuevo estadio.

Sucedió el miércoles, cuando horas después de visitar por primera vez un entrenamiento, fue con su familia a cenar al restaurante argentino Café Prima Pasta en el barrio Little Buenos Aires. Y aunque salieron por la puerta de atrás, no evitó el encuentro con los fans y hasta un beso robado.

Y volvió a suceder el jueves, donde fue con su esposa, Antonela Rocuzzo, y sus tres hijos, Thiago, Mateo y Ciro, a hacer la compra en un supermercado. Se ha analizado hasta qué cereales desayunan.

“Preparado y con ganas”

Todo de momento parece más calmado que en Argentina, en Barcelona o en París. Y días antes de empezar su nueva etapa, Messi aseguraba en una entrevista con el programa de televisión argentino ‘Llave a la eternidad’ que él y su familia están “felices” con la decisión que tomaron, “preparados y con ganas de enfrentar el nuevo reto, el nuevo cambio”.

En esas declaraciones, el siete veces Balón de Oro prometía que su mentalidad y su cabeza no van a cambiar. “Voy a intentar dar lo mejor para mí y mi nuevo club, seguir jugando al más alto nivel”, decía Messi, que se espera que participe en una rueda de prensa el lunes y en un entrenamiento abierto al público el martes.

Su llegada, en cualquier caso, ya es como maná para el Inter, que aún no ha hecho oficial el contrato ni públicos sus detalles, aunque el portal Sportico ha avanzado que será de dos años y medio y un total de 150 millones de dólares en salario, un bono y una participación en el equipo (a lo que se suman también participaciones en Apple y Adidas).

La expectación por su debut en el campo, previsto para el día 21 en un partido contra el Cruz Azul mexicano en la Leagues Cup, ha disparado el precio de entradas, aún disponibles pero con precios en reventa que empiezan en los 200 dólares y llegan (y superan) los 10.000. Nada mal para un equipo que no ha ganado un partido desde el 13 de mayo.

Se han sumado gradas con 3.200 asientos a un estadio que nunca llegaba a llenar su aforo de 18.000. Y desde el anuncio del 7 de junio los seguidores del club en redes sociales se han disparado y la cuenta en Instagram, por ejemplo, ha crecido un 750% y ya es la quinta franquicia deportiva con más seguidoras tras cuatro equipos de la NBA (Bulls, Cavaliers, Lakers y Warriors).

La cuenta del Inter de Instagram ha crecido un 750% y es la quinta franquicia con más seguidores después de cuatro clubs de la NBA.

El de Rosario es, sin duda, visto como un "Messias”, y no solo para Miami, sino para la liga estadounidense MLS y para el fútbol en EEUU, uno de los países que en 2026 acogerá el Mundial. Jorge Mas, otro de los propietarios de su nuevo club, ha dicho que “siempre habrá un antes y un después cuando hablemos del deporte en EEUU”. Y Andrés Cantor, un popular comentarista de fútbol, explicaba en ESPN que “el fútbol de EEUU y la liga MLS en particular van a tener de repente atractivo mundial porque tienen el mejor jugador del mundo”.

Sin duda es lo que espera también Apple, el mastodonte de la tecnología que en junio del año pasado se hizo con una década de los derechos globales de la MLS a cambio de 2.500 millones de dólares, y que dará a Messi una participación en los beneficios por nuevas suscripciones a su pase para la temporada en Apple TV+.