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Negociación colectiva

La patronal de la estiba reclama ayudas para prejubilaciones

Anesco agrupa a 37 terminales marítimas y al 75 % de los trabajadores y negocia con el Gobierno la regulación de las nuevas empresas que prestarán servicios en los puertos

Un momento de la reunión de los dirigentes de Anesco celebrada esta semana. L-EMV

La patronal de empresas estibadoras Anesco, que agrupa 37 terminales marítimas en distintos recintos del sistema portuario español -entre estas las instalaciones de APM-Maersk y MSC- y emplea a más del 75% de los trabajadores del sector (7.400 fijos), negocia contrarreloj con representantes del Ministerio de Fomento y de Trabajo para poder adaptar la nueva regulación laboral del personal de los muelles de carga y descarga de mercancías marítimas a los convenio colectivos. Esto se produce tras el Decreto-ley de reforma de la estiba impuesto por la UE.

Los dirigentes de Anesco, quienes se han reunido con la nueva presidenta de Puertos del Estado, Ornella Chacón, reclaman ayudas para prejubilaciones de empleados incluidos en el antiguo régimen laboral y poder así gestionar los nuevos Centros Portuarios de Empleo-Empresas de Trabajo Temporal (ETT).

Los patronos quieren determinar posibles subvenciones de 120 millones de euros que en su día comprometió el Gobierno del PP para prejubilaciones, así como el nuevo sistema de acceso a la profesión y las características de los nuevos centros portuarios de empleo tras la extinción de las sociedades de estiba (Sagep), firmas de las que hasta ahora dependían todos los estibadores, tenían el monopolio de su gestión y en las que tenían que entrar a participar las empresas que operaban en los puertos.

Avanzar en la flexibilización

Anesco tiene la vista puesta en la próxima reunión de trabajo con organizaciones sindicales y está pendiente también del informe que emita la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) sobre la subrogación de las plantillas a las nuevas empresas de la estiba, que podría considerar ilegal. En ese sentido, los empresarios insisten ahora en «avanzar en la flexibilización de la capacitación profesional requerida para los trabajos que realicen labores de estiba».

Además, reclaman la consideración de «peculiaridades técnicas propias del sector» respecto a la regulación general de las ETT ,como el cálculo de garantías, requerimientos para la formalización de contratos y obligaciones de comunicación a la autoridad laboral, entre otras cuestiones.

El comité ejecutivo de Anesco se ha reunido esta semana para trabajar en la elaboración de las propuestas que trasladará a las organizaciones sindicales para poder así rubricar el V Acuerdo Sectorial Estatal. «Avanzar en la negociación colectiva es una de las prioridades fijadas por la patronal de la estiba para los próximos meses», explicaron los empresarios al término del encuentro. Por otro lado, resaltan la necesidad de seguir tendiendo puentes con el Gobierno y grupos parlamentarios para «perfeccionar el modelo normativo del sector», que estará condicionado por el nuevo reglamento tras el Decreto-ley de reforma aprobado en 2017.

Grandes puertos como el de València, Barcelona o Algeciras ya manejan preacuerdos de convenio colectivo con los sindicatos de la estiba; si bien no los pueden ratificar porque esperan el V Acuerdo Sectorial Estatal.

La empresa de estibadores del Puerto de València -controlada por Noatum, MSC y Maersk, entre otras- ya se ha transformado en Centro Portuario de Empleo. Fue la primera en adoptar el cambio legal del sector en España tras la reforma emprendida por el ejecutivo de Rajoy para adaptarse a las exigencias de la UE de liberalización del servicio de carga y descarga de buques. El pacto prevé mantener los 1.400 puestos de trabajo y acuerda mejora sobre medidas organizativas y de competitividad, que conllevará la reducción de costes de mano de obra y aumento de la productividad.

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