El Instituto Tecnológico del Plástico (Aimplas) ha completado con éxito un proyecto europeo para el desarrollo de una nueva generación de plásticos con capacidad de conducir calor -gracias a la aplicación de técnicas de nanotecnología- que sustituye el cobre y el aluminio de los paneles solares y podrá evitar su robo. Los primeros prototipos del proyecto "Thermalcond", de bajo coste, están dirigidos sobre todo a la industria termosolar.

El sistema permitirá mejorar la eficiencia de los colectores solares térmicos, reduciendo su peso y evitando actos vandálicos debido al bajo coste del material plástico comparado con los metales que reemplaza. Además, el nuevo material conserva las ventajas del plástico, como la resistencia a la corrosión, la versatilidad de diseño y la facilidad de montaje.

La innovación desarrollada por Aimplas utiliza la nanotecnología para conferirle al plástico una conductividad térmica mayor de la que habitualmente poseen los plásticos utilizando cargas nanométricas. Sin embargo, ha conseguido mantener las excelentes propiedades de procesado del plástico para la fabricación de tubos y láminas y de piezas accesorias del colector termosolar. "El desarrollo de los materiales plásticos llevados a cabo en este proyecto ha supuesto un reto debido a la dificultad de mejorar la conductividad térmica de los mismos sin perjudicar su procesado", aseguró la investigadora principal del proyecto, Raquel Llorens.

El proyecto financiado por la Unión Europea está coordinado por Aimplas. También participan cinco empresas y otros dos centros tecnológicos de España, así como institutos de Chipre, Hungría y Reino Unido.

El proyecto también comprende el desarrollo de un novedoso recubrimiento absorbente que gracias a la nanotecnología mejora la eficiencia de transformación de la radiación solar en energía térmica de los colectores.