El secretario del consejo de administración de Bankia, Miguel Crespo, aseguró ayer ante el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu que la auditora Deloitte nunca les informó de que hubiera detectado problemas de viabilidad en la entidad luego nacionalizada. Durante su declaración como testigo, Crespo también dijo que cuando el 4 de mayo de 2012 envió dos correos electrónicos uno al Ministerio de Economía con el plan de viabilidad presentado al Banco de España y otro a los consejeros de Bankia anunciando que Deloitte había pedido más tiempo para finalizar su trabajo se limitó a seguir las instrucciones de su entonces presidente, Rodrigo Rato. Fuentes jurídicas señalaron que el directivo de Bankia insistió en que Deloitte no advirtió sobre la gravedad de la situación del grupo. efe madrid