El director general del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), Manuel Illueca, y el director territorial de CaixaBank en la Comunitat Valenciana, Bibiano Martínez, firmaron ayer en el Palau de la Generalitat un acuerdo marco de colaboración por el que la entidad bancaria abrirá una línea de crédito por importe de 4.000 millones de euros destinados a financiar proyectos empresariales, singularmente de pymes, que son las que componen la mayoría del tejido valenciano.

En su intervención inicial, Martínez explicó que la línea de financiación cuenta «con unas condiciones ventajosas y preferenciales», en especial «para proyectos de innovación, internacionalización o emprendeduría», y que posee también «asesoramiento experto». Posteriormente, tras ser preguntado por cuáles son las especificidades del convenio respecto a la financiación habitual a las empresas, el responsable de CaixaBank indicó que se ofrecen «condiciones de mercado» que no se pueden detallar en el acuerdo debido a la gran variedad de productos que incluye y que va desde circulante a líneas de riesgo comercial, financiación de comercio exterior, factoring y confirming, avales y coberturas.

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, presente en el acto, declaró que este es «un convenio importante» porque va dirigido «a modernizar las empresas» y contribuir al objetivo de reformar el modelo productivo. Por ello, mantuvo que todo lo que sea «inversión e innovación» es «clave y fundamental». En este sentido, calificó de «absolutamente necesario» el papel dinamizador «de bancos tan potentes como CaixaBank». Asimismo, el jefe del Consell expresó su deseo de que el sistema financiero presente en la autonomía, «tras la situación de debacle que hubo en el pasado» con la desaparición de la mayoría de las entidades autóctonas „el Banco de Valencia, de hecho, acabó en poder de CaixaBank„, tenga un «plus de compromiso con la Comunitat Valenciana». En su opinión, eso «se está demostrando».