La información es poder, eso ya lo tenemos claro hace mucho tiempo, y en el tráfico mercantil y comercial tienen una gran relevancia. Por lo general, no se actúa sin información del mercado, de los clientes o de otras empresas.

Por ese motivo, han proliferado en los últimos años los informes de empresas, que son documentos que reflejan las características y circunstancias concretas de una empresa, sobre todo desde el punto de vista financiero, lo que nos permite conocer la solvencia de una determinada empresa antes de entablar relaciones comerciales con ella.

Pero ¿para qué sirve un informe de empresa? En general sirve para conocer el riesgo que puede existir al contratar con una empresa ya sea como cliente, como proveedor o como colaborador. Esa información, nos va a permitir tomar una decisión de forma más segura y con base en datos reales. Por ejemplo, los bancos cuando pretenden demandar por algún impago de un préstamo o hipoteca, o cuando quieren decidir sobre la concesión de un crédito, solicitan este tipo de informes.

En Infocif, existen tres tipos de informes de empresas, el Informe de Riesgo, el Informe Comercial y el Informe+RAI. Cada uno tiene un contenido distinto por lo que podremos elegir uno u otro dependiendo de nuestras necesidades, pero en general tienen como base el siguiente contenido:

Información general de la empresa:

Denominación social

NIF

Fecha de constitución

Marca comercial

CNAE

Domicilio, teléfono y fax de contacto

Descripción

Cargos directivos con nombre apellidos y vinculación societaria

Empresas del grupo, con el detalle de la matriz y las participadas

Principales actos publicados en el BORME: cuentas depositadas, nombramiento de consejeros.

Licitaciones en las que ha participado: importe total de las licitaciones y año de licitación.

Fuentes. Para elaborar un informe de una empresa la información se recaba de los Boletines Oficiales del Estado, de las Provincias y del Registro Mercantil y en estos casos, del Registro de Aceptaciones Impagadas (RAI) o de publicaciones aparecidas en prensa.

El Informe+RAI de Infocif se caracteriza porque contiene un apartado en el que figuran las incidencias de impago de una empresa, derivadas de la información que aparece en el Registro de Aceptaciones Impagadas (RAI). Es concreto consta: el número de apuntes o efectos impagados, el importe total que suman esos efectos, y la fecha de la última incidencia apuntada.

El RAI recoge la información relativa a aquellos impagos de personas jurídicas de cuantía igual o superior a 300 euros, que se produzcan en documentos en los que conste la firma del deudor reconociendo la deuda (letras aceptadas, pagarés bancarios, cheques de cuenta corriente, pagarés de cuenta corriente), que sean de uso en masa en el sistema bancario y que tengan fuerza ejecutiva.

El plazo de permanencia de la información contenida en el RAI es, actualmente, de treinta meses. La información que se podrá consultar es el importe pendiente de pago por el deudor y el número de apuntes asociados a un deudor.

El Informe+RAI tiene un coste de 5 euros en la web de Infocif y nos permite conocer la información esencial de una empresa y los datos de los impagos que tenga, lo que nos va a ayudar en la toma de decisiones relativas a las relaciones comerciales que queramos entablar con otras empresas.