Ironías de la vida, el Consell más abiertamente enfrentado a la sanidad privada va a hacer caja gracias a una red de hospitales privados. La Conselleria de Hacienda subastará el 30 de junio las 42.639 acciones que posee de la mercantil Nisa.

En este grupo de hospitales, que tiene como buque insignia el 9 d´Octubre, acaba de tomar el control el grupo Vithas, controlado por la familia Gallardo (laboratorio Almirall), dando lugar a uno de los mayores grupos de hospitales privados de España.

Se trata de unos títulos que la Generalitat heredó de Emilio Claver Carbonell, fallecido sin herederos y sin dejar testamento. Claver fue uno de los médicos que fundó el Consuelo, origen de este grupo hospitalario, cuyo capital estuvo históricamente muy atomizado entre médicos y pequeños accionistas.

El fallecimiento se produjo hace ya varios años y tras no reclamar nadie el patrimonio, un juez lo traspasó a la Generalitat como heredera abintestato. El Consell las ha tenido en cartera varios años. De hecho, fuentes conocedoras de la empresa señalan que incluso la administración habría cobrado algunos dividendos. Ahora, la Generalitat ha decidido desprenderse de los títulos, no con una venta directa, sino por subasta, como marca la ley. Se desprende una vez ha terminado la guerra por la compra de acciones que ha disparado su precio.

Lo cierto es que Hacienda no ha querido ´sangrar´ a Vithas. Fija el inicio de la puja en 10,8 euros, con lo que el precio mínimo de licitación es de 460.501 euros. La venta se realizará en un solo lote, por el total de las acciones. El precio se sitúa muy por debajo de los 24,5 euros que ha llegado a pagar Vithas por acción en la batalla que ha mantenido el último año con los minoritarios para hacerse con los títulos.

Tasación independiente y a la baja

La Generalitat justifica que el precio de los títulos ha sido tasado por la consultora Faqtum. Ciertamente, está lejos del precio de mercado que ha tenido en los últimos tiempos, pero también se encuentra por encima del valor contable de los títulos y, sobre todo, de su valor nominal, de 1,5 euros por acción.

Al margen de los títulos, la herencia del médico que ha terminado en la Generalitat es importante. Junto a las acciones, Claver legó una vivienda en la calle Xàtiva con tres plazas de parking (ya vendido e ingresado), otra vivienda en la Avenida de Burjassot y un bajo comercial también en Valencia. Además, tenía en dinero y en cuentas de valores algo más de un millón de euros, 3.000 euros de un seguro de vida y casi medio millón de contratos de rentas vitalicias. No es todo. La Generalitat ha heredado también un chalet en la calle Lo Rat Penat de València, acciones en tres bancos y hasta un panteón de la familia en València del que ahora es titular el departamento de Vicent Soler.