La multinacional suiza Stadler Rail AG anunció anteayer que ha sido elegido proveedor preferente de la empresa de Gales Wales & Borders para el suministro de 71 vehículos a partir de 2022. De esta cantidad, 36 serán tranvías y el resto, trenes Flirt.Los 36 tranvías serán diseñados y construidos por Stadler Rail Valencia, la filial de la multinacional suiza en Albuixech, como informó Valencia Plaza.
El tranvía Citylink que hará Stadler es un modelo similar al la empresa asignó para la renovación de seis unidades de la línea 9 del Tram de Alicante entre Benidorm y Dénia. Lo hizo después de adjudicarse el pasado marzo un contrato de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) por 43,3 millones de euros.Cada unidad cuesta una media de algo más de 7 millones.
Los 36 tranvías Citylink circularán desde Cardiff hasta las ciudades de Treherbert, Aberdare y Merthyr Tydfil a partir de 2022, según Stadler.
Gracias a ellos, la capital del país volverá a tener tranvías, situación que no se producía desde hace más de setenta años.
Stadler lleva construyendo trenes desde hace 75 años. Tiene su sede en Bussnang, en el este de Suiza, y cuenta con una plantilla de más de 7.000 personas repartida entre sus diferentes centros de producción, servicios e ingeniería en Suiza, Alemania, España, Polonia, Hungría, República Checa, Bielorrusia y Estados Unidos. Cuenta además con centros de servicios posventa en otros países como Argelia, Dinamarca, Francia, Italia, Países Bajos, Noruega, Rusia, Suecia y Reino Unido.
Presente en la Comunitat Valenciana desde hace 120 años, quiere crecer en el negocio ferroviario en España y su intención es pujar con CAF, Talgo por parte de los trenes regionales que Renfe quiere construir y que supondrá un desembolso de más de 1.500 millones de euros.
Recientemente, la dirección de Stadler y los trabajadores han acordado un nuevo convenio colectivo para regular las condiciones laborales hasta 2022, con el objetivo de mantener los empleos fijos, una mayor flexibilidad en la jornada, reducir las diferencias salariales y garantizar el poder adquisitivo de la plantilla. Con estas medidas, se pretende ofrecer «un marco estable laboral para el personal de Stadler Valencia, que se caracteriza por su firme compromiso de mantener la empleabilidad fabricando vehículos ferroviarios para todo el mundo, evitando la deslocalización de su producción gracias a una decidida apuesta por la investigación tecnológica y la innovación».
El acuerdo trata de «asegurar la competitividad» de la empresa en un momento crucial para los fabricantes de material rodante, como consecuencia de «los repetidos anuncios de renovación de las flotas de servicios regionales y cercanías tras años de parón.
