P ¿Cómo ve el papel que ejerce la mujer en la alta dirección empresarial?

R Lo veo como todo lo bueno que ella sea como profesional y, habitualmente es bueno, porque la que llega es porque está preparada, tiene la actitud adecuada y le presta dedicación.

P ¿Queda mucho por recorrer para igualarse a los hombres?

R Bastante, pero solo en cuanto a porcentajes. Sigue siendo menor el número de mujeres que ocupan altos cargos respecto al de hombres, pero no así respecto a la capacidad de las que están ocupando esos puestos. Las mujeres somos tan eficientes como pueden ser los hombres.

P ¿Todavía es necesario poner en valor el papel de la mujer?

RAhora quien ha de poner en valor su papel es la propia mujer. La sociedad está cada vez más sensibilizada en que no hay diferencias en cuanto a capacidad y talento (salvo raras excepciones que no cuentan). Puede haber diferencias en lo relacionado a la preparación y al trabajo a desarrollar para ejercer ese puesto, pero eso es algo que se soluciona preparándose bien y proponiéndoselo, seas hombre o mujer. Hay que creérselo: podemos hacerlo. Probablemente tenga que ser con más esfuerzo que lo que le cuesta a un hombre, pero podemos y hay que hacerlo. Está llegando el tiempo en que no nos preguntaremos si es hombre o mujer quien está realizando una labor y esto es lo importante. Se debe valorar el talento y la profesionalidad, no lo que eres.

P Como mujer emprendedora ¿ha tenido que renunciar a aspectos de su vida a los que un hombre no renuncia?

R En la vida siempre hay que renunciar porque elegir supone renunciar, eso lo aprendí hace muchos años. He tenido que dejar muchas cosas en el camino. La conciliación, en general, es más complicada para las mujeres por circunstancias culturales y biológicas, pero tenemos que hacerlo si queremos ejercer una profesión y tener una familia. Para conciliar influye la familia y el ambiente laboral y personal en el que te mueves. Cuando mis hijos eran pequeños, mi esfuerzo fue grande.

P ¿Qué consejo le daría a las mujeres que se enfrentan a la disyuntiva de escoger entre vida familiar o laboral?

R Es difícil aconsejar porque cada una tiene sus prioridades, gustos y capacidades. Yo he hecho todo lo posible por compatibilizar mi familia con mi profesión. Al principio, como médica, gasté prácticamente todo mi sueldo en ayuda para mi casa. Con el trabajo en la empresa tuve que compatibilizar las tres actividades. Fue difícil. Ahora, con mis hijos ya mayores y apartada de la medicina, todo es más llevadero. Para mí siempre ha sido importante ejercer mi profesión sin renunciar a la familia a pesar del coste personal que me suponía. Creo que es útil no empeñarse en ser una superwoman, y respecto a la familia, que la calidad del tiempo que le dediques supere a la cantidad. Cada mujer ha de plantearse sus prioridades y adaptarse a las circunstancias por sí misma ya que los demás no tenemos autoridad moral para influir en su decisión.

P Su jefe es el cliente, ¿es un buen jefe?

R El cliente, bueno o malo, es la razón de ser de una empresa. La empresa depende absolutamente de los clientes, trabajamos para y por ellos, estamos a su servicio, así que es importante conocerlo, saber sus necesidades y sus gustos para que los productos cumplan sus expectativas. No me planteo si es bueno o es malo. Es el jefe.

P ¿Quién marca las tendencias, el mercado o las marcas?

R Ambas cosas. Nosotros estudiamos el mercado y elaboramos las tendencias procurando que sean innovadoras, pero también que sean atractivas para el cliente, además posibles y creíbles. No puedes imponer, has de sugerir y dar opciones.

P El recorrido de su empresa comienza en los años 50, cuando prácticamente nadie vestía bañadores y el turismo era una industria embrionaria, ¿cómo se construye Dolores Cortés?

R Con el tiempo y adaptándose a las circunstancias y al mercado. Hemos pasado por muchas vicisitudes, por tiempos buenos y malos, por crisis y auges. Hemos tenido de todo y hasta ahora lo hemos superado por la dedicación y trabajo ilusionado, por nuestra flexibilidad y capacidad de adaptación, por buscar la excelencia y especialmente por contar con un gran equipo integrado y bien preparado trabajando juntos codo a codo. Los éxitos y los fracasos los compartimos.

P ¿Qué diferencia a Dolores Cortés de otras marcas?

R Buscamos la excelencia y la perfección y aunque somos conscientes de que no podemos alcanzarla tratamos de acercarnos todo lo posible. Nuestro producto es la Moda Baño y lo que la acompaña. Nos dirigimos a las mujeres y somos una empresa mayoritariamente de mujeres. Esto nos ayuda a conocer a nuestras usuarias. En la empresa hay diversidad de personas, gustos y necesidades. Igual que nuestras clientas. Todas colaboramos y así podemos acercarnos mejor a crear los bañadores que ayudan a que cada clienta pueda encontrar aquel que haga que se sienta mejor y más guapa. Quizá nuestra diferencia es la impronta que marca el equipo de diseño y patronaje. A esto hay que añadir que, al disponer de buenas instalaciones y personal para la producción y distribución, podemos ofrecer una excelente relación diseño-calidad-precio a nuestras clientas.

P ¿Qué proyectos de futuro o metas se ha marcado para la empresa?

R Son variados y en varios campos. Para ir mejorando nuestro producto hemos emprendido la ampliación y reforma de nuestras instalaciones y de maquinaria importante. Hemos sustituido la máquina de corte automático por otra más avanzada, así como la renovación de los programas informáticos de patronaje y un nuevo programa de gestión integral de la empresa que está en proceso. Por otro lado, estamos estudiando nuevas formas de comercialización a nivel nacional y ampliación de mercados en el extranjero.