El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, manifestó ayer que «el problema» al que se enfrenta la planta de Ford Almussafes (a raíz de la decisión de la multinacional de llevarse la producción los motores EcoBoost a Norteamérica a partir de 2022) «tiene un nombre que es Trump y el proteccionismo americano». Álvarez, se reunió ayer con el president de la Generalitat, Ximo Puig, con quien habló de la situación de la fábrica valenciana, la única que la compañía tiene en España. Ambos se mostraron «plenamente comprometidos» para trabajar por garantizar un futuro a la fábrica valenciana, ha asegurado el líder sindical.

A su entender, lo que está ocurriendo en Ford tiene una «relación muy directa con el proteccionismo americano, que no estaba mirando a Valencia ni a España, sino que está mirando como proteger sus productos». Además, Pepe Álvarez acusó a Vox y al PP de «estar en misa y repicando» por estar «pidiendo el cierre de fronteras, diciendo que tenemos que tenemos que proteger más nuestros productos y a la vez culparnos de situaciones que se producen como consecuencia de esas políticas».

El secretario general de UGT instó a ver «de qué manera el avance que se ha hecho desde el punto de vista que se ha hecho del libre mercado se puede mantener». «No puede ser que los que nos metieron en el proceso de la globalización ahora sean los mismos que como no les va bien nos obliguen a estos giros», señaló.

Por su parte, el secretario general de UGT-PV, Ismael Sáez, señaló que aunque se activaran mecanismos para que las ayudas las empresas se condicionen al mantenimiento de producción y empleo, en el caso de Ford las subvenciones que a la planta de Almussafes representan una «parte ínfima» de sus intereses económicos y «difícilmente van a condicionar el mantenimiento de su producción en Valencia», admitió.

Por otro lado, el secretario general de UGT confirmó que el 43 Congreso Confederal del sindicato se celebrará en Valencia del 24 al 27 de noviembre de 2020.