La Comunitat Valenciana es la única región que ha experimentado una mejoría en la sofisticación de sus exportaciones en los últimos 18 años, aunque se mantiene por debajo de la media española, según el informe La sofisticación de las exportaciones de la Comunidad Valenciana, motor de crecimiento, presentado ayer jueves por Cámara Valencia y CaixaBank.

La industria del automóvil y sus partes y la de los esmaltes son de los sectores que más aportan al Incide de Complejidad Económica de la Comunitat, pero destacan sobre todo la creciente aportación de los productos químicos, aparatos ortopédicos, impresoras y manufacturas del metal, según el documento.

El análisis de la complejidad de las exportaciones de la Comunitat analiza la sofisticación de bienes y servicios exportados desde el punto de vista de su evolución en el tiempo, los principales productos que aportan o restan competitividad al Índice de Complejidad Económica Regional y la evolución de la complejidad por grandes macrosectores industriales.

Permite, así, identificar el esfuerzo realizado por la industria valenciana durante los últimos veinte años a través de resortes competitivos diferentes al precio como son la calidad, la incorporación de la tecnología, imagen y marca. Además, el estudio permite identificar aquellos sectores o productos en los que se observa una mayor posibilidad de diversificación y potencialidad para elevar la complejidad de las exportaciones valencianas.

De ahí que los planes de internacionalización deban apoyar nuevas actividades con alto contenido tecnológico y elevada orientación exportadora, potenciando una industria con un nivel de sofisticación medio-alto y alto.