La Unión General de Trabajadores del País Valenciano concluyó en 2019 los actos de celebración del treinta aniversario de su constitución de ámbito autonómico, un período en el que la central, tras el período de transformación de federaciones (reducidas a tres grandes sectores) y uniones territoriales, ha consolidado una estructura que agrupa a 84.000 afiliados, aglutina a algo más de 10.000 delegados sindicales en centros y, junto con Comisiones Obreras, aglutina el 75 % de la representatividad de los trabajadores asalariados de la Comunitat Valenciana. Con motivo de este aniversario, Levante-EMV concede el premio Portada del mes de noviembre de 2019 a UGT-PV.

El galardón se entregó durante un acto celebrado en la sede del diario al que acudió el director general de Relaciones Institucionales así como la directora del periódico, Julio Monreal y Lydia del Canto, respectivamente. En esta jornada participaron Ismael Sáez, secretario general de UGT-PV, y su plana mayor: Guillermo Martí (vicesecretario general y y responsable de Recursos), Carlos Faubel (vicesecretario general), Isabel López (Política Social), Pilar Mora(Formación, Empleo e Igualdad), Marisa Baena (Salud Laboral, Medio Ambiente y Cooperación), Elvira Ródenas (Relaciones Institucionales), Lola Ruiz Ladrón de Guevara (Acción Sindical) y Constantino Calero (Organización). Además, acudieron dirigentes de sus tres grandes federaciones sectoriales: Miguel Ángel Moro, secretario de Organización de FeSP-PV; Lola Navarro, secretario general de FESMC-PV y Daniel Argente, secretario general FICA-PV.

A la hora de recordar estas tres décadas de trayectoria de la central ugetista Ismael Sáez, máximo responsable de UGT-PV desde mayo de 2016 (quien sustituyó a Gonzalo Pino; antes fueron secretarios generales Conrado Hernández y Rafael Recuenco), reconoció que son muchos los «avances sociales y derechos laborales» conseguidos, si bien «aún queda mucho por hacer» ante la «grave situación que se vive actualmente en Europa». En su opinión, el movimiento sindical debe hacer una propuesta para un salario mínimo interprofesional europeo así como impulsar un Estatuto de los Trabajadores de ámbito europeo.

Nuevos tiempos

«Hace treinta años éramos diferentes porque también las empresas eran diferentes. Queremos un sindicato moderno que sea capaz de atender la reivindicaciones de de los trabajadores y afrontar los nuevos retos que tiene la sociedad valenciana en particular y europea, en general». En ese sentido, los dirigentes de la ejecutiva de UGT-PV, organización que ha tenido que convivir con gobiernos del PSOE y del PP tanto en València como en Madrid, comentaron que los retos actuales tienen que ver con las nuevas realidades laborables fijadas por la globalización y el proceso de transformación digital de la economía.

Tras años de protestas con fuerza, de crisis económica y recortes, de grandes niveles de desempleo, ahora el sindicato abre una nueva etapa de lucha por la recuperación de los derechos laborales perdidos durante la crisis, contra los recortes en las pensiones y la igualdad de los derechos de la mujer, entre otras tareas.

Precariedad laboral

En estos tiempos de cambios en el Ejecutivo central y de nueva legislatura del Govern del Botànic en el Palau de la Generalitat, los dirigentes ugetistas coincidieron al destacar la necesidad de poner en marcha «políticas sociales» que permitan corregir «graves desequilibrios en el mercado laboral» como la elevada tasa de temporalidad y el «abuso de los contratos a tiempo parcial» en empresas de servicios o la agricultura, comentó Guillermo Martí. Pilar Mora lamentó el disparatado empleo precario entre las personas jóvenes y lamentó que el 90 % de los nuevos contratos que oferta el mercado laboral sean eventuales. «Hay que mejorar la calidad del empleo y conseguir condiciones dignas», indicó la responsable de Formación, Empleo e Igualdad de UGT-PV. Lola Navarro destacó el papel del sector público a la hora de relanzar la economía y la ocupación a través de nuevas licitaciones e inversiones y Lola Ruiz agregó que «es fundamental que la empresas cumplan con el salario mínimo profesional», fijado en 900 euros/mes aunque con la previsión de un aumento en los próximos años tal como ha anunciado el Gobierno de coalición de Pedro Sánchez.

Los avances en materia de prevención de riesgos laborales y de salud laboral logrados en los centros de trabajo en estos últimos treinta años fueron destacados también por la dirección de la central sindical. «Pero los riesgos continúan y las condiciones de los trabajadores en las pequeñas empresas son complicadas en muchas ocasiones», reconoció Marisa Baena.

¿Jovenes en los sindicatos? Los dirigentes de UGT comentaron que «los jóvenes necesitan el apoyo de las organizaciones sindicales para luchar contra la precariedad laboral», indicó Isabel López. Por eso la secretaria de Política Social aseguró que esta central mantiene su «lucha continua» para mantener la labor docente entre jóvenes y hacer ver el papel de los sindicatos en los comités de empresa y en la negociación colectiva. También apostó por la formación profesional dual.

Respecto al sector público, Miguel Ángel Moro resaltó la necesidad de apostar por la sostenibilidad en los diferentes sectores de las administraciones y garantizar los beneficios y el empleo en las empresas públicas mejorando su gestión.

Preocupación por Ford

Para el secretario general de la federación que aglutina los sectores industriales, construcción y afines, uno de los principales hitos que tuvieron que superar los trabajadores es la crisis de 2008. «Ha supuesto muchos sacrificios a los trabajadores y en muchas ocasiones se han visto explotados por los empresarios. Necesitamos empresas de verdad y hacer una auténtica política industrial», agregó Argente.

El reciente desarrollo histórico de UGT-PV ha coincidido con el de uno de los motores económicos de la Comunitat Valenciana: Ford Almussafes. Carlos Faubel, a la sazón presidente del comité de empresa de la factoría valenciana, subrayó la contribución de la central ugetista al desarrollo y consolidación de la multinacional del automóvil, que cuenta en València con la planta más competitiva de Europa. En ese sentido, Faubel destacó el acuerdo de competitividad sellado en 2007 con Ford Europa y que sirvió para «atraer inversiones y garantizar la continuidad de la fábrica». Ahora el reto es la electrificación y afrontar el proceso de robotización y de nuevos modelos. «Y mantener el empleo en la planta de motores», agregó. «El sector del automóvil está en reestructuración y concentración en todo el mundo. Veremos», indicó Faubel.

¿Más retos? Este año será el de procesos congresuales para UGT, tanto en el ámbito confederal como local. El 43º Congreso estatal de UGT se hará por primera vez en la historia en València, el próximo mes de noviembre.