Primer acercamiento relevante entre CaixaBank y los sindicatos en las negociaciones del ERE que comenzaron a finales de abril. El banco ha presentado este martes una nueva propuesta, que incluye entre otras medidas disminuir en 205 los despidos lo que, sumado a las 686 recolocaciones internas ya planteadas en las últimas semanas, reduciría las salidas de las 8.291 planteadas inicialmente a 7.400. Los sindicados han «agradecido el movimiento» realizado por la empresa pero lo han considerado «insuficiente», por lo que han mejorado a su vez su propuesta, lo que la entidad también ha «agradecido» por considerarla «seria y concreta» a pesar de lo «lejano de su posición».

Además de reducir los despidos, el banco se ha comprometido a mantener la retribución fija y antigüedad de los trabajadores recolocado y ha añadido el derecho a reincorporación en Caixabank por voluntad del empleado una vez transcurridos seis años en caso de producirse una vacante en un radio de 50 kilómetros del centro de destino del trabajador. También ha planteado el derecho de retorno sin límite temporal en el caso de que la filial deje de estar controlada por el grupo o de que la sociedad matriz pueda realizar procesos de reestructuración de empleo que les puedan interesar al trabajador.

Acuerdo en BBVA

Por otro lado, BBVA y los representantes de los trabajadores cerraron ayer un acuerdo sobre el Expediente de Regulación de Empleo (ERE), que supondrá el despido de 2.725 trabajadores. Según informaron fuentes sindicales al término de la reunión de ayer, la última del periodo negociador, saldrán de la entidad 2.725 empleados, a los que se suman otras 210 excedencias incentivadas, tal como contó ayer este diario. Esta cifra se aleja en más de mil de las 3.798 extinciones que BBVA propuso al inicio de la negociación, también gracias a que el banco ha aceptado recolocar a alrededor de 500 trabajadores en centros de atención remota.