La Feria del Automóvil de Valencia ha registrado hoy un llenazo a pesar de las dificultades para salir esta mañana de la capital del Túria debido a los cortes de calles por la maratón. Los compradores van en busca de gangas, pero se han encontrado con el problema de la falta de stock que sufre la mayoría de los marcas. La demora media en la entrega de un vehículo por la escasez mundial de chips (que ha frenado la producción) ronda los cuatro meses, pero en algunos modelos se va hasta los diez.
Los compradores se están decantando mayoritariamente por los modelos de combustión (sobre todo de gasolina) y por los híbridos. Muchos no se atreven a dar el paso a los eléctricos puros por la escasez de los puntos de recarga y el alto precio que todavía cuestan.
En este contexto de escasez, una buena parte de los compradores se está decantando por los vehículos de ocasión a pesar de que están hasta un 40 % más caros que en otros certámenes por la demanda.
David Martínez, jefe de vehículos de ocasión de KIA Mercamoto, explicó que los compradores buscan sobre todo coches económicos. “Nuestros coches de ocasión tienen entre uno y dos años”, precisó. Martínez incidió en que los compradores todavía son reacios a comprar coches eléctricos por la inversión que conllevan. “Algunos entran en pánico cuando piensan en la autonomía, pero cuando pruebas estos coches te das cuenta de que son muy prácticos”, aseguró.
La feria seguirá abierta hasta mañana Día de la Constitución, para aprovechar que es festivo.
