La abogada Rosario Porto padece algunos problemas psiquiátricos, según indicaban ayer fuentes de su entorno que recordaban que no hace mucho estuvo ingresada en una clínica unas tres semanas. Estos problemas coincidieron con ruptura de su relación con Alfonso, hace unos meses y la repentina muerte de sus padres el año pasado.

Estas mismas fuentes apuntaban que en el cuartel de Lonzas, a donde fue trasladada tras su arresto el martes, se quejó de la suciedad de la manta y de lo incómodo de las instalaciones. Unas afirmaciones que fueron desmentidas por la propia Guardia Civil, que recordó que Rosario no había tenido contacto con nadie, hasta que ayer por la mañana se reunió por primera vez con su abogada para asistir al registro de la finca.

Ayer se mantuvo, al igual que su exmarido, muy entera durante el registro de la vivienda de Teo, e incluso en ocasiones se reía abiertamente mientras los policías judiciales inspeccionaban la finca y la casa.

Los registros domiciliarios continuarán hoy en Santiago, ya que se inspeccionarán los domicilios de los padres de Asunta en Ensanche.