Reunión sin fecha

Sánchez presiona para cerrar el cara a cara y Feijóo sigue dándole largas

Tanto Ayuso como Moreno ven inoportuno que la reunión se celebre justo días después de conocerse el pacto del PSOE y EH Bildu en Pamplona

Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo se saludan tras la investidura.

Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo se saludan tras la investidura. / EFE

Pilar Santos / Juan Ruiz Sierra

La comunicación entre Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo nunca ha sido sencilla, pero cada vez se encuentra más emponzoñada. Esta semana comenzó con una llamada del gabinete del presidente del Gobierno al del líder del PP para cerrar un encuentro entre ambos. La Moncloa ofreció tres fechas, pero los populares no quisieron cerrar ninguna, alegando que resultaba incomprensible que Sánchez no llamara directamente a Feijóo y exigiendo al mismo tiempo que el orden del día de la cita quedase plasmado "por escrito".

Las posibilidades de celebrar una reunión enjundiosa disminuyen conforme transcurren las jornadas. Mientras Feijóo continúa dando largas, Sánchez eleva la presión, pero al mismo tiempo aleja el acercamiento con el PP a través de iniciativas como el acuerdo entre los socialistas navarros y EH Bildu para que los abertzales se hagan con la alcaldía de Pamplona o los guiños a Carles Puigdemont, con quien el presidente del Gobierno contempla mantener un encuentro próximamente.

El jefe del Ejecutivo y el líder de la oposición ni siquiera se ponen de acuerdo sobre los asuntos a tratar. El PSOE quiere abordar la reforma del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), cuyo mandato lleva cinco años caducado, la financiación autonómica y la reforma del artículo 49 de la Constitución para eliminar el término "disminuido". El PP pretende añadir también la amnistía y la inflación. Y así van pasando los días.

Manifestación el domingo

La Moncloa solo ve "excusas" de Feijóo para no acudir, en una actitud que considera "insólita". El presidente del PP dio por hecho este jueves en Bruselas que acudirá a la cita, aunque el debate sobre si debería hacerlo se ha abierto en el seno de su partido. En privado, varios barones autonómicos y vicesecretarios admiten que las noticias de esta semana "le ponen cuesta arriba esa foto con Sánchez", aunque creen que es una decisión que solo Feijóo puede tomar.

Fuentes del equipo de Isabel Díaz Ayusoque en 2022 animó a Sánchez a romper con Sánchez cuando ambos estaban a punto de pactar los nombramientos del CGPJ, entienden que Feijóo quiera asistir a la reunión "por educación", aunque consideran que después del pacto de Pamplona "no tiene sentido" y anticipan que será infructuosa. Desde la Junta de Andalucía fuentes del presidente, Juanma Moreno, señalan que no puede ir de forma inminente y tiene que dejar de pasar un poco de tiempo, aunque no concretan cuánto. "Feijóo no puede estar el domingo en Pamplona manifestándose contra Sánchez y reuniéndose con él dos días después", tercia otro presidente autonómico.

La cúpula del PP y varios barones consultados por este diario consideran que tanto la moción de censura de Bildu que el PSOE va a apoyar en Pamplona como la intervención en el Parlamento de Estrasburgo de Sánchez, afeando al PP europeo las alianzas de Feijóo con Vox, dejan al jefe de la oposición con muy poco margen de maniobra para cerrar justo ahora la renovación del poder judicial o acercar posiciones en financiación autonómica, una compleja materia que suele enfrentar a las comunidades independientemente de qué partido las gobierne.

Feijóo dijo este jueves desde Bruselas, donde participó en la tradicional reunión con el PP europeo antes del Consejo, que el acuerdo en la capital navarra entre socialistas y aberzales es "el pacto más miserable de todos los que ha suscrito Sánchez en su carrera política". En cuanto a la intervención en Estrasburgo, afirmó que había causado "malestar" entre los dirigentes europeos. Sin embargo, cuando se le insistió no quiso concretar qué mandatarios se habían quejado del presidente del Gobierno.

La "parálisis" de Pamplona

También desde la capital belga, Sánchez limitó la alianza con Bildu al caso "concreto" de Pamplona, que justificó por la "parálisis" en un ayuntamiento que no ha logrado aprobar presupuestos durante el último lustro, y recordó a Feijóo cuál era su "deber" como jefe de la oposición. "No hay argumentos para que no se siente a la mesa y podamos desbloquear asuntos que afectan al día a día de los ciudadanos", dijo. Poco después, fuentes del Gobierno elevaron el tono. "El lunes planteamos tres posibilidades diferentes de calendario para poder acomodar las agendas y en un hecho insólito en nuestro país, tres días después el PP todavía no ha respondido. Estamos a la espera de que el líder de la oposición diga si acude o no a esta reunión. Como hemos dicho públicamente, Feijóo puede plantear allí las cuestiones que estime oportunas", señalaron.

Dentro de esta marea de desencuentros y reproches, hay un asunto en el que existe sintonía entre los dos principales partidos: la necesidad de reformar ya el artículo 49 de la Constitución. Aun así, el PP exige garantías de que los socios parlamentarios de Sánchez (ERC, Junts, EH Bildu...) no aprovecharán este cambio en la Carta Magna para promover otros más ambiciosos, que puedan afectar al modelo de Estado.