El fuego que se desató en el último pleno de Manises, y que acabó con la expulsión de la sesión del portavoz del PP Francisco Izquierdo por un enfrentamiento dialéctico con el alcalde Jesús Borràs, lejos de apagarse ha acabado en explosión. El munícipe de Compromís ha firmado la expulsión del líder popular de la junta local de gobierno por los «incidentes acumulados durante los últimos meses» protagonizados por Izquierdo, «con faltas de respeto y salidas de tono en los plenos», que según el comunicado remitido por el cuatripartito, «han llegado a menoscabar la autoridad del alcalde en los plenos».

Izquierdo formaba parte de la junta local, según el ejecutivo que dirige Borràs, en un intento de «favorecer el diálogo y de evitar el oscurantismo que ha caracterizado la actuación de ese órgano en los mandatos del Partido Popular». Pero, los «altercados, culminados con los incidentes intencionalmente provocados» en la última sesión plenaria —originados en la respuesta de la edila de Educación Pilar Molina a un joven del público que preguntó por el auditorio Pepe Sancho en la sesión plenaria anterior— han acabado con la expulsión del exalcalde del PP.

Por su parte, el portavoz popular fue contundente y acusó al ejecutivo de ejecutar una «acción» que demuestra «la actitud de Borràs y los suyos: no les gusta que haya oposición y les digan las cosas claritas a la cara». Izquierdo atribuyó su cese «al sectarismo, odio y rencor del cuatripartito» y afeó al alcalde que no le hubiera llamado desde el incidente del pleno. «Ni siquiera ha tenido la valentía hoy de comunicarme el cese y se ha escudado en el secretario general del ayuntamiento», dijo el portavoz.

El exalcalde definió que la estrategia de Borràs es «seguir con la crispación y el enfrentamiento» para «hacer ver que las decisiones las toma obligado por la precisión de sus socios, cuando todos sabemos que es él el que ordena y manda con puño de hierro». Así, lo tachó de «alcalde perdedor» que llegó a la alcaldía «por la ayuda de sus socios tras no ganar las elecciones» y eso «es una debilidad muy grande. Es una marioneta».