La deblace que sufrió el Partido Popular el pasado 26M en la comarca, donde ha perdido más de 20.000 votos respecto a 2015 y ha bajado de 209 concejales a 178, vivió ayer las primeras consecuencias por el mal resultado. Hasta cuatro concejales de la formación -los cabezas de lista por Moncada y Picanya y otros dos ediles de dichos municipios- presentaron ayer ante la Junta Electoral la renuncia a las actas de regidor de las que tenían que tomar posesión el próximo 15 de junio.
Los cuatro representantes del PP han querido dimitir ya y no esperar al primer pleno del mandato, fijado para julio, ya que el de junio es solo de posesión y constitución de la corporación, para evitar que la burocracia administrativa provoque que los ediles sustitutos no entren en el pleno hasta finales de septiembre.
En el caso de Moncada, los que han renunciado al acta son Miguel Gallego, candidato popular el 26M, y Lola Muñoz, cuarta de la lista. «Moncada necesita una regeneración política, es hora de nuevas caras de gente preparada, joven, que entra con mucha fuerza e ilusión», indica Gallego. Víctor Gallego y Vicente Valverde serán los sustitutos en el pleno.
De este modo, el grupo popular se completa con la presidenta del partido a nivel local y número 2 de la lista, María Jesús Martínez y el secretario general de los populares de Moncada y número 3, Pau March. «Un equipo joven, que aúna la energía y pasión de tres jóvenes menores de 35 años, con la experiencia de nuestras siglas», define Gallego.
Cabe destacar que tanto Gallego como Muñoz figuran como imputados en el caso Pemsa, donde la empresa municipal de Moncada hipotecó terrenos que previamente había vendido. Ambos, continuarán trabajando a nivel orgánico en el Partido Popular y se han puesto a total disposición de los nuevos concejales para ayudarles y asesorarles durante esta legislatura. «Esto no es una despedida, porque vamos a seguir en el PP trabajando con la misma fuerza que siempre, para que nuestra ciudad retome la luz que ha perdido», añade Gallego.
Relevo en Picanya
Por su parte, en Picanya, la candidata y presidenta local Encarna Casabán Rubio también ha presentado su renuncia ante la Junta Electoral de Zona (JEZ) de València, al igual que lo ha hecho el número tres de la candidatura Daniel nemesio Gil. Según explica la caberza de lista, el objetivo de esta decisión es que se queden en el consistorio «dos personas muy preparadas (Ángel Javier Montero Hernández y Remedios Pellicer Martínez) que son las que representan el futuro del partido».
En Picanya, el histórico alcalde socialista Josep Almenar ha logrado más de 3.200 votos (el 54% del recuento) lo que significa que tendrá once ediles de los 17 que tiene la corporación. El Partido Popular obtiene dos, igual que Compromís y Ciudadanos.
En la decisión de Casabán ha pesado tanto el mal resultado de su partido (similar al de otras poblaciones de l'Horta Sud) como la necesidad de renovar el partido. «Yo me presenté para posibilitar una renovación y este cambio llegará ahora. Hemos renunciado para que un abogado que lleva muchos años trabajando en la administración pública y una asesora empresarial son los que se hagan cargo del partido a partir de ahora para preparar el futuro», ha explicado Encarna Casabán a Levante-EMV sobre el caso.
Diversas fuentes consultadas en el seno del PP han indicado que las primeras cuatro renunciar no serán las únicas en la provincia de València sino que puede haber otros ediles, cabezas de candidatura o no, que den el caso de abandonar para que corra la lista y entren otros nuevos.
